La economía mexicana ya comenzó a mostrar señales de desaceleración, pues creció 0.1 por ciento de enero a febrero de este año, lo que representó el menor crecimiento mensual en tres meses, de acuerdo con datos ajustados por estacionalidad del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Y lo que sucede, es que en diciembre y enero, el Indicado Global de la Actividad Económica (IGAE), avanzó 0.4 y 0.6 por ciento, respectivamente, lo que evidencia que la economía del país ha venido bajando de ritmo de crecimiento.
De acuerdo con el organismo autónomo, el crecimiento mensual de 0.1 por ciento fue resultado de los avances mensuales de 4.2 y 0.7 por ciento que reportaron las actividades primarias y las secundarias, respectivamente. Las terciarias bajaron -0.1 por ciento.
Al respecto, Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Banco Base, consideró que tomando en cuenta dicho escenario, es factible esperar un crecimiento trimestral de apenas 0.90 por ciento en el primer trimestre del año.
“Con esto, el IGAE registró su tercer mes consecutivo de crecimiento, aunque mostrando desaceleración; considerando los crecimientos del IGAE de enero y febrero y suponiendo un crecimiento mensual de 0.1 por ciento en marzo, el Producto Interno Bruto (PIB), de México habría crecido 0.90 por ciento trimestral y 3.4 por ciento anual en el primer trimestre”, argumentó.
El INEGI agregó que, con base a datos originales (sin estacionalizar), y a tasa anual, resulta que el IGAE creció 3.8 por ciento en febrero, derivado de los repuntes de 7.5, 3.8 y 3.5 que registraron las actividades primarias, terciarias y secundarias, en ese orden.
El IGAE permite conocer y dar seguimiento a la evolución del sector real de la economía en el corto plazo. Este proporciona valiosa información para la toma de decisiones. Su cobertura geográfica es nacional y alcanza una representatividad de 94.7 por ciento del valor agregado bruto del año 2013, año base de los productos del Sistema de Cuentas Nacionales de México (SCNM).
