Al señalar que los asesinatos de reporteros inician con palabras que en la palestra pública “hostigan, desprecian, calumnian y acusan”, periodistas de Morelos advirtieron que las acusaciones contra la prensa son permisos para matar.

Red de corresponsales

Al señalar que los asesinatos de reporteros inician con palabras que en la palestra pública “hostigan, desprecian, calumnian y acusan”, periodistas de Morelos advirtieron que las acusaciones contra la prensa son permisos para matar.

Durante la instalación del Comité del Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, en el Estado de Morelos, la periodista Esther Martínez Sotelo señaló que en aquella entidad no están dispuestos a tolerar ninguna de estas acciones cometidas desde el poder.

“La violencia, hay que decirlo, no inicia con un asesinato. Con la privación de la vida culmina la espiral de violencia que inicia con actitudes hostiles desplegadas desde las tribunas públicas que deberían servir para resolver los problemas del país, y que luego se transforman en señalamientos, acusaciones, persecución, violentación y lamentablemente en muerte”, expresó.

A nombre del gremio la comunicadora aclaró que la prensa no busca tratos especiales, sino que se le garantice su seguridad e integridad a la hora de realizar su trabajo.

Y es que en lo que va de este año en México han sido asesinados cinco periodistas, hechos que derivaron en protestas por parte de reporteros en San Lázaro, durante la mañanera desde Palacio Nacional y un día después desde Tijuana.

Por separado, el subsecretario Alejandro Encinas reconoció la crisis en la defensa de periodistas y defensores de Derechos Humanos. Además  aseguró que,  desde la administración Federal están conscientes de que actualmente existe un alto nivel de intolerancia y violencia en contra de estos grupos.

En su intervención Enrique Irazoque, titular de la unidad técnica del mecanismo federal, destacó que más del 40% de las agresiones al gremio provienen de autoridades municipales, y el 30%  de la delincuencia organizada.

Además puntualizó que la problemática de agresiones a la prensa  surge en México desde hace muchos años y la crisis se ha agravado; destacó que para responder a este reto se requiere de la participación de los gobiernos estatales y municipales.

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