En México, cada segundo ocurren 51 delitos, los cuales pueden ser asaltos, fraudes, extorsión, entre otros, reveló el Instituto Nacional de Estadística y Geografia (INEGI).

Por medio de un reporte, el organismo autónomo precisó que durante el año pasado ocurrieron 26.8 millones, lo que representa una tasa de 28 mil 701 delitos por cada 100 mil habitantes, cifras menores a las de 2021. Lo anterior representa una tasa promedio de 1.3 delitos por víctima, tasa similar a la de 2021.

El INEGI agregó que comparado con 2021, en 2022, la tasa de delitos por cada 100 mil habitantes bajó en cuatro entidades federativas, tres presentaron un alza y 25 no tuvieron cambios.

En 2022, las entidades con las tasas más altas fueron Ciudad de México, con 46 mil 032 casos; Estado de México, con 36 mil 583 y Querétaro, con 35 mil 823 casos. Los estados con las tasas más bajas fueron: Chiapas, con 14 mil 111; Veracruz, con 17 129 y Tamaulipas, con 18 mil 205.

El delito más frecuente fue fraude, con una tasa de cinco mil 770 casos, le siguieron el robo o asalto en calle o transporte público, con cinco mil 689 y extorsión, con cinco mil 056.

La incidencia delictiva en la mayoría de los delitos personales —los que afectan a la persona de manera directa y no colectiva (como robo a casa habitación)— fue mayor en los hombres que en las mujeres.

En cuanto a delitos sexuales, las mujeres fueron las más vulneradas, con una tasa de incidencia de tres mil 470 delitos por cada 100 mil, cifra estadísticamente inferior a los tres mil 935 delitos estimados en 2021. La tasa para este tipo de delitos entre los hombres fue de 330 por cada 100 mil. En otras palabras, se contabilizaron 11 delitos sexuales contra mujeres por cada delito sexual contra hombres.

¿Y cuántos delitos fueron denunciados?

En 2022, del total de delitos ocurridos, solo 10.9 por ciento se denunció, cifra estadísticamente superior a la registrada en 2021.

El Ministerio Público (MP) o Fiscalía estatal inició una carpeta de investigación en 69.3 por ciento de estas denuncias, lo que implica que del total de delitos ocurridos en 92.4 por ciento no se investigó (cifra oculta o cifra negra).

De esta manera, el porcentaje de la cifra oculta en 2022 fue estadísticamente inferior al que se presentó en 2021 (93.2 por ciento).

De 69.3 por ciento de denuncias en las que se inició una investigación, en 46.1 por ciento el resultado fue no pasó nada o no se resolvió la denuncia y 31.4 por ciento resultó en trámite. Lo anterior se traduce en que 77.5 por ciento de las denuncias no arrojaron conclusión alguna. El resultado fue positivo para la o el denunciante en 15.5 por ciento de los delitos en los que se inició una investigación.

“Lo anterior significa que, en 2022, 1.2 por ciento de los delitos cometidos tuvieron una represalia; las razones para no denunciar delitos se atribuyeron a la autoridad en 59 por ciento; otras causas ocupó 40.3 y en 0.7 por ciento de las ocasiones, no se especificó”, precisó el INEGI.

Por lo anterior, en 2023, 60.5 por ciento de la población de 18 años y más consideró la inseguridad como el problema más importante que le aqueja. Siguieron aumento de precios, con 44.1 por ciento y la salud, con 30.5 por ciento.

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