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El jaloneo por los órganos de dirección en la Cámara de Diputados ya arrancó, a días de que comience la 65 Legislatura en San Lázaro.
En la 64 Legislatura –la que está por concluir–, Morena tuvo durante el primer año la mesa directiva y la Jucopo, pues, junto con el Partido del Trabajo (PT), Encuentro Social (PES) y una alianza de última hora con el PVEM, alcanzó los 334 votos necesarios para obtener mayoría calificada.
En la 65 Legislatura, que iniciará el 1º de septiembre próximo, esos partidos aliados reunirán 278 legisladores, es decir, solo la mayoría absoluta. El bloque opositor, formado por el Partido Acción Nacional (PAN), el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD), tampoco tienen mayoría absoluta, pero con los 199 legisladores que se prevé que tenga, podrá acceder al control compartido de la Cámara y legislar con acuerdos de por medio.
“La nueva conformación obligará -para reformas constitucionales, pero también para las que requieren mayoría simple- que esta Legislatura sea la del debate y no la del agandalle”, explicó el diputado electo del PRD.
