Derivado del alza que reportan alimentos y demás productos de consumo básico, la cena de Navidad o Año Nuevo será una auténtica muestra de “lujo”.
De acuerdo con la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), para este 2023, el costo de la cena para una de dichas festividades (ya sea Navidad o Año Nuevo), podría alcanzar los 11 mil 700 pesos para una familia de 10 a 15 personas, mientras que el año pasado fue de siete mil 800 pesos, lo que implica un incremento de 50 por ciento.
Lo anterior, agregó Cuauhtémoc Rivera, presidente de ANPEC, porque los costos de los alimentos y demás insumos reportan alzas de hasta 60 por ciento respecto a los precios que prevalecieron a finales de 2022.
Sin embargo, el empresario advirtió que la opción de “cenar fuera de casa” tampoco constituye una alternativa económica, pues comentó que el ticket promedio por persona para festejar en 2022 en un restaurante familiar con platillos típicos como pasta, lomo, guarnición, ensalada de manzana y alguna bebida fue de 800 pesos, mientras que en 2023 costará mil 100 pesos en promedio, es decir, 3.00 pesos (38 por ciento), más caro.
“En un restaurante de especialidad, donde los alimentos son más elaborados, tuvo un costo en 2022 de mil 200 pesos y este año será de mil 500 pesos”, agregó.
Cuauhtémoc Rivera dijo que en un restaurante gourmet, con una cena que incluye otros tipos de carne como salmón o cortes más caros, el ticket promedio osciló en mil 500 pesos el año anterior mientras que este año en mil 800 pesos. La variación promedio es de hasta el 40 por ciento.
“Aunque cada vez se realizan menos posadas y en su lugar se hacen los intercambios navideños, siguen siendo parte de estas fiestas; el gasto para una posada tiene una variación general de precios del 50 por ciento, en donde se incluyen elementos como la piñata, la comida a base de ‘Vitamina T’, bebidas, botanas y decoraciones”, comentó.
Por lo anterior, el dirigente de la ANPEC afirmó que la conclusión obvia es que ya ni hacerlo en el hogar es asequible, por lo que la mejor opción no es tan sólo celebrar en casa, sino que el festejo debe ser “de traje”, que no es otra cosa, explicó, “que hacerlo en colaboración y que todos los invitados se comprometan a llevar parte de la cena, ya sea alimento o bebidas para prorratear el gasto en dos o tres núcleos familiares. Esto es la mejor forma de sobrellevar este gasto extraordinario en los mejores términos posibles para la economía familiar”.
“Sin duda las fiestas decembrinas 2023 serán más caras que el diciembre pasado y eso plantea un reto, celebrar sin endeudarse, reto nada menor, pero hay que intentarlo. La estrategia que debemos buscar es romper con las inercias clásicas de terminar la celebración en las casas de empeño y empezar el año con dolores de cabeza al acarrear deudas de las fiestas de diciembre a un enero frío y con precios elevados, para luego enfrentar la cuesta de enero con poco dinero y, además, endeudados”, dijo Cuauhtémoc Rivera, presidente de ANPEC.