Redacción

El tequila es una de las bebidas alcohólicas más importantes de México pero más allá de su delicioso sabor su consumo puede tener valiosos beneficios para la salud.

Y es que el tequila se obtiene a partir de la fermentación, y posterior destilación del jugo extraído del agave azul, el cual le confiere una gran cantidad de beneficios si se consume de forma moderada.

Si bien sabemos que la ingesta de alcohol en exceso es malo para la salud en cantidades moderadas algunas bebidas pueden tener grandes beneficios, como ocurre con el vino y, en este caso, del tequila.

En este sentido, mientras que una copa de vino al día aporta importantes antioxidantes y mejora la salud del corazón, un caballito de tequila puede brindar importantes beneficios digestivos, debido sobre todo a su importante contenido de inulina, una fibra soluble que favorece la digestión.

La inulina contribuye al estímulo en la producción de ácidos gástricos, facilitando así el procesamiento y la absorción de nutrientes beneficiosos de los alimentos. Además, la presencia de otros metabolitos del agave también pueden estimular el metabolismo y la digestión de los alimentos.

Es relevante mencionar que la inulina tiene el efecto de regular los niveles de glucosa en sangre y de colesterol, lo que promueve un sistema digestivo saludable, de acuerdo con información de un estudio publicado en Dialnet.

Pero este no es el único beneficio que podría tener en tu salud el consumo moderado de esta bebida, sino que beber un caballito de tequila al día, puede tener las siguientes propiedades:

-Fuente de prebióticos: El agave, planta de la cual se destila el tequila, contiene inulina, una fibra que actúa como prebiótico y puede ayudar a mejorar la salud del sistema digestivo al fomentar el crecimiento de bacterias beneficiosas en el intestino.
-Bajo índice glucémico: A diferencia de otros alcoholes que pueden contener azúcares añadidos o derivados del almidón, el tequila está hecho de agave, que tiene un índice glucémico bajo. Esto significa que puede tener un menor impacto en los niveles de azúcar en sangre, aunque las personas con diabetes o problemas relacionados deben consumirlo con precaución y consultar a su médico.
-Efectos relajantes: El alcohol, en cantidades moderadas, puede tener un efecto relajante y ayudar a disminuir la ansiedad. Esto favorece un estado de relajación que podría contribuir a una mejor calidad del sueño, aunque es importante no depender del alcohol como ayuda para dormir.

Es crucial tener en cuenta que los beneficios mencionados pueden verse completamente contrarrestados por los riesgos asociados al consumo excesivo de alcohol, incluyendo dependencia, problemas de salud mental y física, y efectos negativos en las relaciones sociales y laborales.

En este sentido, los beneficios anteriores únicamente se observan con el consumo de un caballito máximo al día pues una ingesta mayor podría tener efectos contraproducentes. Cabe mencionar también que de acuerdo con el beneficio que se busque obtener dependerá también el momento del día en que se ingiera.

Si se busca como digestivo lo mejor será después de la comida pero si se busca como relajante será más efectivo algunos minutos antes de dormir y después de cenar para evitar acidez y reflujo.