Redacción

En caso de que no se concrete pronto una regulación específica para la venta de vaporizacdores electrónicos, existe el riesgo de que se presenten casos de intoxicación por el uso de sustancias prohibidas y adquiridas en el mercado negro, tal como ocurrió en Estados Unidos, advirtió la organización México y el Mundo Vapeando.

“Lo más importante en una legislación tiene que ver con una protección de los consumidores; lo que merecemos los consumidores, es poder acceder a productos que tengan estándares de calidad, que sean tan satisfactorios que tengamos la seguridad de lo que estamos utilizando no puede llevarnos a una situación como la que se causó en Estados Unidos”, afirmó el presidente de la organización México, Juan José Cirón Lee.

Por lo anterior, afirmó que es urgente formular y aprobar una regulación específica para la distribución y venta de esos dispositivos, toda vez que su presencia en el mercado nacional ya es una realidad y representan una opción efectiva para todos aquellos que desean abandonar el vicio del tabaquismo.

El especialista advirtió que la falta de regulación provoca que en México impere una peligrosa desinformación, pues advirtió que la propia Secretaría de Salud y algunas instituciones educativas han advertido que los cigarros electrónicos son la causa de enfermedades súbitas, cuando lo cierto, afirmó, es que el problema radica en el uso de sustancias obtenidas en el mercado negro, tal y como sucedió en Estados Unidos y que cobró la vida de varios jóvenes vapeadores.

“Hace aproximadamente un mes y medio la Secretaría de Salud (SSA), a través de la COFEPRIS emitió un aviso epidemiológico en el que se informaba a la población a que tuviera cuidado con el vapeo por las muertes ocurridas en Estados Unido; esa información la emitió el gobierno de manera errónea porque la que causa de las enfermedades es el líquido adulterado clandestino THC”, explicó.

De esta manera, lamentó que instituciones como la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS), abonen a la desinformación que impera en el país, pues afirmó que la Comisión responsabilizó -erróneamente-, a los vaporizados de los incidentes ocurridos en Estados Unidos y soslayó por completo el uso de sustancias peligrosas compradas en el mercado negro.

El especialista afirma que la venta de ese tipo de dispositivos en México se ha logrado gracias a las series de amparos que han promovido diferentes comerciantes, ante la discrepancia jurídicas que existen entre la propia Suprema Corte de Justicia y la Secretaría de Salud federal.

Por ello, el miembro de la organización México y el Mundo Vapeando considera necesario que en México se abran mesas de discusión para todas las voces participen y se logre definir un marco de regulación exclusiva para los vapeadores, es decir, ajeno totalmente a la ley que se aplica sobre el consumo de tabaco, en el entendido, enfatizó, de que los dispositivos son un artículo totalmente diferente al cigarro convencional.

“Como asociación pedimos es que exista una regulación para que el cigarro electrónico estuviera claramente dentro de la ley y que esa legislación lo contemple como un sistema diferente al uso de los cigarros convencionales, con el objeto de que no se le apliquen las mismas restricciones y se tenga en consideración el concepto de reducción del daño”, expuso.

Sobre este punto, explicó que la necesidad de formular una regulación específica a los vapeadores radica en que, así como la pesada carga fiscal que se aplica sobre los cigarros convencionales va en línea con el alto daño que provocan en la salud de los fumadores, los criterios para la venta y comercialización de los electrónicos deben ser diferentes por su marginal impacto.