En 2020 y 2021 continuarán los estímulos fiscales en materia de Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a los combustibles automotrices a fin de evitar incrementos de precios, de acuerdo con un decreto publicado este 31 de diciembre en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
El decreto que entrará en vigor el 1 de enero de 2020 y estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2021, está rubricado por el Presidente Andrés Manuel López Obrador y por el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Arturo Herrera Gutiérrez.
Expone que los estímulos fiscales han tenido como objetivo proteger el poder adquisitivo de los hogares mexicanos al evitar tanto incrementos en términos reales, como movimientos abruptos en los precios al público de los combustibles.
Esto, derivado de la volatilidad en los mercados globales de los energéticos y en el tipo de cambio, originada principalmente por tensiones geopolíticas y comerciales en diversas regiones del mundo, así como por la incertidumbre respecto a la oferta y demanda futuras de crudo a nivel mundial
Por ello, “se hace necesario ampliar para los ejercicios fiscales de 2020 y 2021, la aplicación de los estímulos fiscales en materia del impuesto especial sobre producción y servicios a los combustibles automotrices, para que se mitiguen los efectos de la volatilidad de los precios internacionales de las gasolinas y el diésel y del tipo de cambio, y evitar incrementos de precios en términos reales”.
El decreto destaca que esta medida que es congruente con el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024 en cuyo apartado 3. “Economía” establece que “no habrá incrementos de impuestos en términos reales ni aumentos a los precios de los combustibles por encima de la inflación”.
Señala que también resulta conveniente ampliar para los ejercicios fiscales de 2020 y 2021 el estímulo fiscal a las personas que cuenten con permisos expedidos por la Comisión Reguladora de Energía (CRE) para el expendio al público de petrolíferos en estaciones de servicio que estén ubicadas en la franja fronteriza de 20 kilómetros paralela a la línea divisoria internacional con los Estados Unidos de América, consistente en una cantidad por litro de gasolina enajenada.
Ello, a efecto de limitar las diferencias entre los precios de dichos combustibles con la región colindante con Estados Unidos, y de conformidad con el Código Fiscal de la Federación, el Ejecutivo Federal tiene la facultad para conceder estímulos fiscales.
De esta manera, el decreto refiere que se otorga un estímulo fiscal durante los ejercicios fiscales de 2020 y 2021 a los contribuyentes que importen y enajenen gasolinas, diésel y combustibles no fósiles, consistente en una cantidad equivalente a un porcentaje de las cuotas aplicables a dichos combustibles.
Además, se otorga un estímulo fiscal durante los ejercicios fiscales de 2020 y 2021 a las personas que cuenten con permisos expedidos por la CRE para el expendio al público de petrolíferos en estaciones de servicio que estén ubicadas en la franja fronteriza de 20 kilómetros paralela a la línea divisoria internacional con Estados Unidos.
Por otra parte, la SHCP también se publica en el DOF un acuerdo mediante el cual da a conocer un aumento al estímulo fiscal del IEPS de casi un peso a la gasolina Magna y el Diésel, y mantiene sin estímulo fiscal a la gasolina Premium, para el periodo comprendido del 1 al 10 de enero de 2020.
Así, en los primeros días del nuevo año, el estímulo fiscal para la gasolina de menos de 91 octanos aumenta, para ser de 16.40 por ciento, desde de 4.82 por ciento, equivalente a 0.812 centavos, por lo que ahora los consumidores pagarán 4.138 pesos por cada litro de combustible adquirido en estaciones de servicio.
Mientras que la gasolina Premium, no tendrá estímulo, al ser está semana de 0.00 por ciento, el equivalente a 0.00 pesos, por lo cual los automovilistas pagarán 4.180 pesos de impuesto por cada litro adquirido en la gasolinera.
El Diésel tendrá un estímulo fiscal mayor en comparación al periodo previo, y ahora será de 19.39 por ciento, desde el previo de 11.95 por ciento, con lo cual los transportistas pagarán 4.385 pesos de impuesto por cada litro comprado en los puntos de venta.