Con datos a diciembre de 2024, el 32 por ciento de la población ocupada en alguna actividad productiva ya sea formal o informal laboran en condiciones críticas, reveló el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
De esta manera, según datos del organismo autónomo, resulta que alrededor de 19 millones de mexicanos (de los 59 millones de personas con alguna ocupación productiva que hay en el país), no están satisfechos con su actual actividad económica, es decir, experimentan condiciones inadecuadas de empleo desde el punto de vista del tiempo de trabajo, ingresos o una combinación insatisfactoria de ambos.
Este grupo incluye a las personas que trabajan menos de 35 horas a la semana por razones ajenas a sus decisiones, a quienes trabajan más de 35 horas semanales con ingresos mensuales inferiores al salario mínimo y a quienes laboran más de 48 horas semanales y que ganan hasta dos salarios mínimos.
En materia de desempleo, el INEGI agregó que en diciembre de 2024, la población desocupada ( aquellas personas que no trabajaron siquiera una hora durante la semana de referencia de la encuesta, pero manifestó su disposición para hacerlo y realizó alguna actividad para obtener empleo), sumó 1.5 millones de individuos, lo que representó que la tasa de desocupación en México ascendió a 2.4 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA).
Por género, resultó que en las mujeres la población desocupada fue de 2.2 por ciento y en los varones de 2.6 por ciento.
En cuanto al tamaña de la informalidad laboral, el INEGI reportó que en diciembre de 2024, la población ocupada en la informalidad laboral (es decir no tienen prestaciones mínimas de ley como seguridad social, ahorro para el retiro y la vivienda, entre otros beneficios), fue de 31.8 millones de personas, con lo que la tasa de informalidad laboral 1 (til1) se estableció en 53.7 por ciento de la población ocupada, porcentaje similar al del último mes de 2023. La til1 urbana fue de 42.5 por ciento.