Por Francisco Romero

El subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, denunció que la tabacalera Phillip Morris empujó reformas a la Ley de Impuestos Generales a la Importación y Exportación para favorecer la aprobación en exclusiva de la marca de sus cigarros electrónicos.

En el marco de la conferencia mañanera de este martes, el funcionario reveló que la semana pasada fueron identificados cabilderos de Phillip Morris operando en la Cámara de Diputados y que el resultado fue que legisladores presentaron una iniciativa en donde se prohibía la importación de dispositivos electrónicos de nicotina o vaporizadores, a excepción de los calentadores de tabaco, de los cuales, el único proveedor en México es la tabacalera mencionada.

“Es un truco de la industria para crear una controversia comercial; se trata, a través, de la Ley General de Impuestos a la Exportación e Importación quitar la prohibición de los tres tipos de productos novedosos de tabaco”, denunció el subsecretario en presencia del presidente López Obrador.

En este sentido, dijo que esta modificación abre una puerta interpretativa para dar el aval al uso de calentadores de tabaco pero se daría una negativa a los vaporizadores, lo que derivaría en tribunales internacionales.

La aprobación de dicha iniciativa ya fue aprobada en Cámara de Diputados y estaba programa para abordarse en el pleno del Senado de la República,

De esta manera, es claro que por intereses de la tabacalera Phillip Morris, secretarías de Estado y hasta diputados federales afines a la Cuarta Transformación (4T), están enfrentados e incluso contravienen las decisiones del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Y lo anterior, porque mientras el presidente de la República, a través de la Secretaría de Salud (SSA) y de Hacienda (SHCP), ha emitido diversos decretos para prohibir la venta e importación de calentadores de tabaco y cigarros electrónicos para proteger la salud de los mexicanos, la Secretaría de Economía (SE), y recientemente diputados de Morena han emitido abruptas disposiciones que quebrantan dichas disposiciones, con el extraño objetivo de favorecer a la mencionada empresa tabacalera.

De tal suerte, que este martes 14 de diciembre senadores de Morena podrían sentar un duro revés legislativo a los decretos presidenciales que se han emitido para prohibir el uso de cigarros electrónicos en México, sin importar las decisiones y argumentos que ha presentado el propio López Obrador en su mañanera.

El contexto

El 19 de febrero de 2020, López Obrador, a través de la SHCP, emitió un decreto presidencial para prohibir la importación de toda la gama de cigarros electrónicos y calentadores de tabaco,  con el objetivo de resguardar la integridad de los mexicanos.

“La utilización de estos dispositivos genera inflamación de las vías respiratorias, el incremento de glóbulos blancos en sangre, así como opacidades bilaterales pulmonares (manchas en el pulmón), baja oxigenación de la sangre o inclusive falla respiratoria, además de un aumento de la sensibilidad de las células de las vías respiratorias a infecciones virales. Se prevé que su uso a largo plazo aumente el riesgo de enfermedad pulmonar obstructiva crónica y cáncer de pulmón”, argumentó el decreto.

Sin embargo, de manera abrupta, un viernes por la tarde, del 16 de julio de este año, la Secretaría de Economía (SE), emitió un decreto para permitir única y solamente la importación de un tipo de cigarros electrónicos, es decir, aquellos conocidos como calentadores de tabaco, cuyo único proveedor en México es la tabacalera Phiilip Morris, si, la misma que fabrica los cigarros Marlboro.

El tema llegó a la conferencia de prensa del presidente Andrés Manuel López Obrador y el 9 de agosto el político tabasqueño reconoció que desconoció dicho revés, por lo que anunció que la titular de la SE, deberá explicarle las razones por cual determinó hacer a un lado el decreto presidencial de 2020 y permitió la importación de los calentadores de tabaco.

“No estoy informado sobre eso, le voy a preguntar a la secretaria de Economía, Tatiana Clouthier”, acotó,

Se agudiza el jaloneo

El 17 de agosto, el propio López Obrador reconoció que había un error en materia de cigarros electrónicos, lo cual, adelantó, se enmendaría de inmediato, en virtud de que se trata un asunto de salud pública.

“Me plantearon a mi la situación y que no (aprobar los cigarros electrónicos), porque afecta la salud; sin embargo, pasó el tiempo y expuesto de otra manera, yo firmé un decreto para permitir la importación”, argumentó, pero reconoció que se trató de un desacierto, por lo que dijo que “cuando se trata de un error que afecta la salud del pueblo, debe corregirse de inmediato”.

No obstante, pasó el tiempo y el 19 de octubre, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), le entró al tema y determinó inconstitucional la prohibición para la venta, distribución y comercialización de vaporizadores.

Aun así, bajo el argumento de buscar preservar la salud de los mexicanos, el gobierno federal emitió, nuevamente un decreto el 22 de octubre para prohibir la importación de toda la gama cigarros electrónicos, al igual que lo hizo en febrero del año pasado.

La SE y diputados morenistas contra AMLO

El tres de diciembre pasado, la Secretaría de Economía de Tatiana Clouthier publicó en su página de internet un proyecto de reforma a la Ley de los Impuestos Generales de Importación y de Exportación, en donde se prohibía, efectivamente, la importación de cigarros electrónicos, “excepto los dispositivos de calentamiento de cartuchos unidades desmontables con tabaco”, si, en efecto, los calentadores de tabaco cuyo único proveedor en México es Phillip Morris.

De manera paralela, el pasado jueves de diciembre, se aprobó la iniciativa presentada por el diputado morenista, Carlos Noriega Romero, que fue avalada en la Comisión de Comercio y, posteriormente, en el Pleno de la Cámara de Diputados, en donde se logró incluir una modificación a una fracción arancelaria en materia de cigarros electrónico que logra beneficiar a un solo proveedor del mercado.

Es decir, son dos procesos (uno vía Ejecutivo y otro por el Legislativo), con un fin en común: Validar la importación de un solo tipo de cigarros electrónicos, en detrimento de las disposiciones que han emitido tanto el propio presidente López Obrador como la Secretaría de Salud como de Hacienda.

En este sentido, este martes 14 de diciembre, en el Senado de la República se discutirá uno de los dos procesos que han empujado “curiosamente” diputados de Morena y la SE, lo que implicaría un duro revés al interior de la autollamada Cuarta Transformación.

Es claro, la agenda la definen poderosos intereses de la tabacalera, en detrimento de la salud.