Por Alicia Valverde Reyes

La garantía para el desarrollo del campo mexicano es que haya un Estado consciente para impulsarlo en sus diferentes ámbitos de producción, con tarifas y sistemas de servicio público, no con el concepto comercial absoluto, señaló el director de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett Díaz.

El funcionario refirió que el sistema mexicano establecido por el Estado tiene un mecanismo de subsidios y que parte de esos se destina al campo, pero si el campo se queda en manos de los intereses galácticos, refiriéndose al sector privado que genera energía, éste no va a subsistir.

“A los intereses extranjeros se les invita a participar. Se les permitirá una participación de 46 por ciento, contra el 54 permanente del Estado, pero bajo el control de intereses nacionales”.

“Solamente en manos del Estado con el interés definitivo sobre el propio crecimiento de la nación, puede el campo tener posibilidades de salir adelante, me refiero a la gran mayoría de los campesinos. A lo mejor los grandes consorcios agrícolas si tendrían una relación con esos grupos. El campo no podría subsistir, es el peligro más grande para los campesinos mexicanos”, sostuvo.

Participación foránea de 46%

Al participar de manera virtual en la conferencia número 32 del ciclo Autosuficiencia Alimentaria e Innovación Tecnológica con Prácticas Sustentables, con el tema: “Debate sobre la Reforma Eléctrica y sus Implicaciones para el Medio Rural”, Bartlett destacó que el objetivo de la reforma constitucional energética es que el Estado tome posesión y control del sistema eléctrico nacional, a través de la CFE.

Sostuvo que no hay expropiación, se invita al sector privado a participar “pero con el control del Estado mexicano”, para el cual la electricidad se convierte en un sistema de interés público, es un cambio de gran importancia.

Quieren desparece a la CFE

En su opinión, hay un diseño perfecto para el despojo del sistema eléctrico nacional y desaparición de la CFE y, un atraco con el esquema vigente, ya que mientras todo el mercado eléctrico de país vale 315 mil millones de dólares y la CFE tiene un valor de 370 mil millones de dólares, los privados buscan apropiarse del sistema que es 34 veces más el valor de su inversión, que aseguran fue de 44 mil millones de dólares, aunque han recuperado la mitad

Aseveró que de mantenerse la reforma que hizo Enrique Peña Nieto, la CFE desaparece y se mantienen los intereses de cuatro o cinco empresas dominantes que se apoderan del mercado.

La reforma está en parlamento abierto, el sector privado ha estado representado por expertos, la CFE también, “contrario a la reforma de Enrique Peña Nieto que se manejo en sigilo y con velocidad”. Fue una reforma constitucional sin convocatoria, estudios y debates, y presumieron que había sido una aprobación histórica, “ahora se busca un debate nacional”.

Buscan apropiarse del sistema eléctrico  

El funcionario señaló que el autoabastecimiento no hace servicio público y que con la reforma del sexenio pasado empezaron a crecer los generadores independientes y comenzó a ser desplazada la CFE.

En este sentido resaltó que existen 110 sociedades de autoabasto sin competencia y con privilegios de despacho, monopolios privados que concentran a los grandes consumidores como la industria, cadenas comerciales, que son las que más consumen en un sistema eléctrico, aunque el mayor número de usuarios son pequeños.

“El generador independiente y de autoconsumo tienen el 52 por ciento de la energía del país, no porque sean eficiente, sino porque se constituyen en organismos ilegales, que buscan la desaparición de la CFE y que las empresas extranjeras de apoderen del sistema eléctrico”, sostuvo.