Por Francisco Romero

El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, anunció que México ya tiene un plan en materia económico para enfrentar los embates que provocó el conflicto bélico entre Ucrania y Rusia.

En este sentido, el primer mandatario precisó que el gobierno mexicano garantizará el abasto oportuno y competitivo de energéticos como el gas y la electricidad, con el objetivo, dijo, de que no aumenten de precio.

“Estamos nosotros desde hace algún tiempo preparados para que si nos aumenta mucho el precio del gas de importación podamos echar a andar todas las plantas de generación de energía eléctrica que no lo requieran, para evitar el aumento en los costos”, compartió.

Además, en el marco del inicio de los ataques armados en el este de Europa, el presidente ratificó la postura mexicana ya expresada por el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard: evitar la guerra y solucionar los problemas por la vía diplomática.

“En términos de política exterior nos vamos a seguir conduciendo promoviendo que haya diálogo, que no se utilice la fuerza, que no haya invasión. No estamos a favor de ninguna guerra. México es un país que siempre se ha pronunciado por la paz y por la solución pacífica de las controversias. Esa es la postura internacional de México”, dijo López Obrador.

Sin dar mayor detalles, el funcionario adelantó que se pondrán en función máxima de su capacidad a las centrales hidroeléctricas para evitar depender del gas, así como de evitar posibles faltas de energía eléctrica. Sobre la gasolina, indicó que existe configurado un apoyo gubernamental al recurso, el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS).

“Ya tenemos ese plan para actuar. Producir más energía eléctrica con agua. En el caso de las gasolinas, igual. Hay un subsidio. De modo que, aunque aumente el precio de importación o del petróleo crudo, que eso no se traslade a los consumidores, que no aumente por encima de la inflación”, expresó.

Finalmente, respecto a los ajustes en las bolsas de valores y las monedas, López Obrador destacó que hasta antes de la oficialización en los ataques armados, el peso mexicano estaba posicionado con una tendencia fuerte.

“Nos agarró con una apreciación del peso favorable”, comentó.