Las presiones inflacionarias continuarán en el mundo y México no es la excepción, pues especialistas consultados por el Banco de México (BANXICO), consideran que la atípica alza de precios persistirá al menos un año y medio más.
Y lo anterior, porque analistas consultados por el Banco de México (BANXICO), elevaron de 6.67 a 6.88 por ciento su expectativa de crecimiento para este año del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), y para el 2023 la incrementaron de 4.18 a 4.40 por ciento.
De esta manera, consideran que será hasta 2024 cuando la inflación se coloque, nuevamente, dentro del rango objetivo de entre dos y cuatro por ciento
Por lo anterior, los economistas consultados por el banco central consideran que será hasta final del presente sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador cuando cedan las presiones inflacionarias.
Para final del 2021, el INPC se colocó en 7.36 por ciento (el mayor nivel en más de 20 años), luego de que en 2020 se situó en 3.15 por ciento.
¿Y el crecimiento económico?
Respecto a la actividad económica del país, los analistas consultados por el BANXICO prácticamente mantuvieron su pronóstico de crecimiento para este 2022 (1.76 por ciento frente a 1.73 previsto en abril), pero recortaron de 2.02 a 1.94 su estimación para el siguiente año. Para el 2024, la estimación la ajustaron de 2.04 a 2.13 por ciento.
Bajo dichas previsiones y tomando en consideración los descalabros de -0.1 y -8.2 por ciento en 2019 y 2020, respectivamente, así como el rebote de 4.8 por ciento alcanzado en 2021, resulta que durante el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador la economía mexicana reportaría un crecimiento promedio anual de 0.3 por ciento, es decir, prácticamente será nulo el crecimiento que se tendrá durante los seis años de la presente administración.
Los especialistas consideran que, a nivel general, los principales factores que podrían obstaculizar el crecimiento económico se asocian con la gobernanza (41 por ciento), las condiciones económicas internas (20) y la inflación (20 por ciento).
A nivel particular, los principales factores son: la incertidumbre política interna (14 por ciento de las respuestas); los problemas de inseguridad pública (14 por ciento); las presiones inflacionarias en el país (14); la debilidad en el mercado interno (seis); la incertidumbre sobre la situación económica interna (seis por ciento); otros problemas de falta de estado de derecho (seis por ciento de las respuestas); y el aumento en precios de insumos y materias primas (seis por ciento de las respuestas).
