La Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (AZCARM) denunció a finales de junio ante la Fiscalía General de la República (FGR) a Eduardo Mauricio Moises Serio, también conocido como ‘Papa bear’, en su calidad de dueño del Gran Santuario Mexicano Jaguar Negro-Tigre Blanco o Black Jaguar-White Tiger por el abandono y maltrato de cientos de felinos de diversas especies, varias de ellas en peligro de extinción.
“Constituyendo un grave daño a nuestra biodiversidad y vida silvestre toda vez que existe evidencia de que muchos de los ejemplares bajo su custodia han muerto como consecuencia de dicho abandono”, señaló AZCARM a través de un comunicado.
La asociación asegura que recibió fotografías y videos de extrabajadores de la fundación que muestran que cientos de grandes felinos se encuentran en condiciones de abandono, sin alimento, sin cuidados médicos y sin espacios adecuados para su subsistencia.
“Muchos de ellos presentan heridas expuestas y diversos niveles de desnutrición. Incluso existen evidencias de que varios ejemplares ya han muerto de hambre y otros han perdido la vida al desangrarse por comerse y arrancarse su propia cola. De acuerdo con los terribles testimonios, algunos animales han sido sacrificados, mientras que otros han llegado a devorarse entre ellos”, apunta el documento.
“Además, las condiciones del lugar en donde actualmente habitan todos estos felinos no cuentan con el espacio vital para su libre desarrollo. Los materiales con los que están compuestas las jaulas no cumplen con las características necesarias para la protección de los animales ni de las personas que ahí laboran, y se observan nulas condiciones sanitarias”, agrega el comunicado de AZCARM.