El cáncer de mama es el tumor maligno más común y la primera causa de muerte por tumores malignos en mujeres mexicanas. En 2020 se diagnosticaron 29,929 nuevos casos de este tipo de cáncer y se registraron 7,931 muertes por esa causa, según datos de Globocan.

Los principales factores de riesgo son ser mujer, tener 40 años o más, haber empezado a menstruar antes de los 12 años, no haber tenido hijos y no haber amamantado, tener antecedentes familiares, la menopausia, ser genéticamente susceptible a este tipo de cáncer y la obesidad, entre otros, además de que algunos estudios clínicos asocian este cáncer a la deficiencia de vitamina D3.

El doctor Víctor Marín, especialista en Ginecología y Salud Reproductiva, puntualizó que, “el efecto antiinflamatorio de la vitamina D3 podría estar relacionado con el control de la progresión del cáncer debido a su labor de bloqueo en la producción de células malignas, lo que disminuye el riesgo de metástasis, es decir, que las células cancerosas se extiendan a otros órganos”.

Detalló que un aporte adecuado de esta vitamina reduce significativamente el riesgo de muerte por cáncer de mama, ya que en diversos estudios como “La vitamina D y el cáncer de mama: pasado y presente”, “Vitamina D y su papel en el cáncer de mama” y “Explorando el metabolismo y la función de la vitamina D en el cáncer”, mostraron que las mujeres con niveles bajos de este nutriente, al recibir cantidades suficientes de vitamina D3 tenían una mejor respuesta a los tratamientos, acción que también se ha observado en tumores malignos de colon y próstata.

Explicó que la vitamina D3 o colecalciferol se produce en la piel cuando nos exponemos al sol, no obstante por el temor al cáncer de piel las personas se exponen cada vez menos a la radiación solar. Otra fuente para obtener esta vitamina es la de incluir en la dieta diaria alimentos que la contienen como los pescados azules (salmón, bacalao, caballa y sardina), la yema de huevo y el hígado de res.

La dosis recomendada para tener y mantener niveles adecuados de vitamina D3 son 4,000 unidades internacionales diarias, para lo cual se necesitaría ingerir grandes cantidades de alimentos con este nutriente, exponerse al sol una o dos horas diarias o tomar, bajo supervisión médica, una tableta al día de colecalciferol con la cantidad antes mencionada.

“Tomar una tableta de vitamina D3 con 4,000 unidades internacionales es una forma fácil y segura de conseguir niveles adecuados de este nutriente, además de que es necesario prevenir o tratar la obesidad, porque esta enfermedad produce un estado de inflamación y secuestra la vitamina D3 en el cuerpo, impidiendo su función protectora”, señaló el doctor Marín Cantú.

El especialista enfatizó que la prevención y diagnóstico oportuno es la mejor forma de evitar más muertes por cáncer de mama, por lo que a partir de los 20 años las mujeres deben explorarse sus senos cada mes con el fin de observar si hay algún abultamiento o cambio en las mamas y acudir con un especialista y, a partir de los 40 o antes, si tienen antecedentes familiares deben realizarse una mastografía cada uno o dos años porque es estudio más eficaz para la detección oportuna de este tipo de tumor maligno.