El gobierno peruano declaró al embajador de México, Pablo Monroy Conesa, como persona non grata y le pidió salir del país en las próximas horas. México calificó como reprobable la acción de Perú y advirtió que no cambiará su postura respecto a la situación de ese país.
Esto sucede, luego de que el gobierno de México reveló haber concedido asilo a la familia del ex presidente de Perú, Pedro Castillo en la embajada mexicana en Lima y de las diversas expresiones sobre la situación en el país andino del presidente Andrés Manuel López Obrador,
Antes, la actual presidenta de Perú, Dina Boluarte, anunció que llamaría a consulta a sus embajadores en México, Colombia, Argentina y Bolivia, por considerar una injerencia en sus asuntos internos el que esos países firmaran una carta en donde se cuestiona la destitución del ex presidente Pedro Castillo.
El embajador de México había sido llamado para transmitirle su rechazo por las expresiones de las autoridades mexicanas que, a juicio del Ejecutivo constituyen una injerencia en los asuntos internos de ese país.
Pese a ello, el secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrad, dijo en su cuenta de Twitter que “Me informa Pablo Monroy, embajador en Lima que el gobierno de Perú le ha fijado 72 horas para salir del país. Encuentro esa decisión infundada y reprobable. La conducta de nuestro embajador ha estado apegada a derecho y al principio de no intervención. México no variará su posición”.
