El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, se dijo “muy preocupado” por el trato que reciben las empresas de su país en México.

Esto, después de que la minera estadounidense, Vulcan Materials, denunciara que militares mexicanos irrumpieron en sus instalaciones en el estado de Quintana Roo.

“El potencial de que un caso como este tenga un efecto paralizador para una mayor inversión o compromiso de nuestras empresas a medida que ven lo que está sucediendo correctamente debería ser una verdadera preocupación del gobierno federal”, declaró el funcionario estadounidense.

El secretario de Estado aseguró que ha abordado repetidamente, con el presidente Andrés Manuel López Obrador, la preocupación por el trato que reciben en México las compañías de su país.

En el caso de Vulcan afirmó que el gobierno de Estados Unidos ha actuado “muy activamente” tanto desde el terreno como desde Washington para defenderla.

Y dijo que “hemos solicitado información tanto a las autoridades locales como el Gobierno Federal mexicano sobre la presencia militar y policial”.