Redacción

En la zona hotelera de Cancún, Quintana Roo, se dio a conocer el hallazgo de tres personas sin vida, las cuales presentaban heridas por impactos de bala, por lo que se tuvieron que activar los protocolos de seguridad correspondientes. Más tarde las autoridades informaron que, tras un operativo de búsqueda se encontró el cadáver de otra persona, con lo que suman cuatro víctimas.

“Al momento se encuentra un despliegue de fuerzas en la zona para dar con los presuntos responsables; hay dos presuntos involucrados en los hechos asegurados, además de personal de seguridad privada, quienes están siendo interrogados por la FGE para el deslinde de las responsabilidades. Los occisos al parecer se encuentran relacionados con actividades de narcomenudeo, descartando que sean trabajadores o turistas”, dijeron las autoridades en un video compartido por la tarde del lunes 3 de abril.

Las primeras tres víctimas fueron encontradas a un costado del hotel Fiesta Americana Condesa, ubicado en el kilómetro 16.5 del boulevard Kukulcán, poco antes de las 10:00 horas de este lunes, donde momentos antes se habían reportado detonaciones de arma de fuego. Debido a ello, se dio aviso al 911 para que arribaran los servicios de emergencia y la zona fuera acordonada.

Al lugar llegaron elementos de los tres órdenes de gobierno (incluida la Policía de Quintana Roo, la Secretaría de Marina y la Guardia Nacional). Sin embargo, los paramédicos determinaron que las tres víctimas ya no contaban con signos vitales, mientras turistas extranjeros y nacionales observaban las diligencias.

Ante este suceso, la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo dio a conocer que inició una carpeta de investigación por el hallazgo de los tres cuerpos sin vida en el municipio de Benito Juárez. “Las autoridades trabajan para esclarecer los hechos y dar con el paradero del o de los responsables”, se detalló.

Asimismo, se desconoce si se trató de un ataque directo o hubo un intercambio de balas, pues medios locales indicaron que antes de la llegada de los elementos de seguridad, pobladores de la zona escucharon varios disparos.

De manera extraoficial se indicó que las personas ejecutadas eran de nacionalidad mexicana, quienes presuntamente estarían relacionadas con la venta de droga, posteriormente se informó que estarían relacionadas al narcomenudeo.

Estos hechos ocasionaron que se desplegara un fuerte operativo encabezado por las corporaciones de seguridad en el municipio Benito Juárez, principalmente en la zona turística y hotelera.

Este episodio violento ocurrió luego de que a mediados de marzo el Departamento de Estado de Estados Unidos emitiera una alerta de viaje para sus ciudadanos que tenían planeado trasladarse a Cancún, con motivo de las vacaciones de primavera (conocidas como “spring break”). Y es que si bien Quintana Roo cuenta con lugares paradisíacos (como Playa del Carmen y Tulum), también se ha reportado la presencia de grupos criminales.

Además de la venta de droga en Tulum y Playa de Carmen, los homicidios forman parte de las acciones perpetradas por las organizaciones delictivas asentadas en Quintana Roo, además del cobro de piso y extorsiones. El caso más reciente fue el del empresario Cipriano Torres, quien fue privado de su libertad el 19 de marzo en Chetumal, cuando se encontraba en su domicilio.

Días después el empresario fue localizado sin vida. Por su parte, las autoridades aseguraron un vehículo utilizado en el secuestro y dos sujetos fueron detenidos, mismos que fueron identificados como Antonio “N” y Ángel de Jesús “N”. Se presume que presuntos miembros del Cártel de Caborca estarían detrás de estos hechos, según reportes de la Fiscalía estatal.

En el estado gobernado por Mara Lezama se reportaron 259 homicidios (tanto dolosos como culposos) en el primer bimestre del año, de los cuales más de 60 se perpetraron con armas de fuego, según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

Asimismo, del 13 al 19 de marzo se efectuaron 143 detenciones en flagrancia a lo largo de la entidad, de las cuales 38 tuvieron que ver con delitos contra la salud, es decir, que estaban relacionadas con la venta o distribución de drogas.