El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, denunció que grandes agricultores de Estados Unidos, vinculados a legisladores, presionaron al gobierno estadounidense para solicitar un panel de solución de controversias, después de que México decidió impedir que el maíz amarillo transgénico sea para consumo humano.

En su conferencia Mañanera de este viernes en Palacio Nacional, el jefe del ejecutivo Federal denunció que las grandes empresas agrícolas en la Unión Americana lograron presionar a los legisladores de su país para pedir el panel, ya que son las que financian sus campañas políticas.

“Ellos se inconforman, yo entiendo, son las presiones de los grandes agricultores que están vinculados a legisladores. Tienen mucha influencia. Es que en Estados Unidos, como aquí, pero allá de manera abierta, aquí de manera encubierta, las grandes corporaciones les dan dinero para sus campañas a diputados, a senadores, a presidentes (…) entonces son como sus empleados y están más al servicio de ellos que del pueblo”, dijo.

López Obrador afirmó que es importante que el gobierno de Joe Biden haya solicitado el panel de controversias, ya que no es un asunto sólo para México, sino que impacta a consumidores de todo el mundo.

“Nosotros lo que hicimos, y es por lo que se inconformaron, fue emitir un decreto para que no se use el maíz amarillo que nosotros consideramos transgénico, en el consumo humano que el maíz amarillo pueda utilizarse de forraje, pero no para el consumo humano”, dijo.

Adelantó que su gobierno buscará que se forme un equipo binacional de expertos para analizar  si el maíz es transgénico, daña o no la salud.