Las vacaciones acabaron, faltan horas para el inicio de clases y la compra de útiles escolares está en su apogeo. Sin embargo, pese a las prisas, es necesario evitar “compras de pánico” para no caer en gastos innecesarios y excesivos que puedan dañar la economía familiar.
En ese sentido, la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), recordó que, derivado de su programa Quién es quién en los precios, ha detectado una importante variación de costos sobre un mismo producto, como el caso del pegamento líquido, el cual muestra diferencias de más de 30 por ciento.
Por ejemplo, el pegamento Resistol 850, presentación de 225 gramos, tiene un precio de 44 pesos en la Abastecedora Lumen, sucursal Satélite, pero en la cadena Papelería Tony, sucursal San Ángel, tiene un costo de 61 pesos, es decir, 17 pesos (38 por ciento), más caro.
Otro caso es el mismo pegamento, pero en presentación de 110 gramos, el cual se puede conseguir en 28 pesos en la Abastecedora Lumen, sucursal Satélite, pero en el Office Depot de Echegaray cuesta 37 pesos, lo que implica una diferencia de nueve pesos, equivalente a 32 por ciento.
Un ejemplo más es el de presentación de 55 gramos, el cual tiene un precio de 21 pesos en la Abastecedora Lumen de Satélite, pero en el mercado Soriana de Atizapán se vende en 27 pesos, es decir, 28 por ciento (seis pesos), más caro.
Por lo anterior, la PROFECO recomendó a los padres de familia no dejar de comparar precios y calidad de los diferentes artículos escolares, con el objetivo de ejercer un consumo inteligente que no dañe la economía familiar.
Para ello, la institución recordó que tiene a disposición de los interesados los resultados de su programa Quién es quién en los precios, con el objetivo de conocer los precios máximos, mínimos y promedio de diferentes artículos, como el caso de los útiles escolares.
