Las mayores tasas de inflación en más de 20 años que enfrenta México podrían comenzar a incidir en las revisiones salariales, lo que podría derivar en un espiral de precios-salarios, alertó el Banco de México (BANXICO).
Así, de acuerdo con la minuta de la reunión que sostuvieron los miembros de la Junta de Gobierno del banco central, con motivo del anuncio de política monetaria del pasado 29 de septiembre, dos de los participantes consideraron que comienza a crearse una correlación entre precios y salarios, lo que podría derivar en espirales inflacionarios.
De esta manera, en cuanto a las revisiones salariales, uno de los miembros de la Junta de Gobierno del BANXICO estimó que podrían exacerbarse por aumentos adicionales al salario mínimo, el cual podría incrementarse en más de 20 por ciento en los próximos dos años.
Por su parte, otro enfatizó que la alta inflación parece haber comenzado a incidir en las revisiones salariales, lo que podría implicar el riesgo de una espiral precios-salarios.
Ante dicho escenario, la mayoría de los participantes comentaron que las expectativas de las inflaciones general y subyacente para 2022 y 2023 volvieron a incrementarse.
Algunos apuntaron que ello ha sido en línea con el aumento observado de la inflación. La mayoría indicó que las expectativas de mediano plazo exhibieron en el margen cierto incremento y señaló que las de largo plazo se mantuvieron estables, si bien por arriba de la meta. No obstante, algunos destacaron que su distribución ha presentado una mayor dispersión.
Respecto de las expectativas para la inflación subyacente, uno mencionó que las de largo plazo disminuyeron en el margen. En este contexto, otro refirió que aunque las expectativas de inflación de mediano y largo plazos han comenzado a estabilizarse,
siguen en niveles elevados. En cuanto a las expectativas extraídas de instrumentos de
mercado, la mayoría señaló que han continuado deteriorándose. Algunos comentaron que las de largo plazo se mantienen ligeramente por arriba del tres por ciento. Algunos apuntaron que la compensación por inflación y riesgo inflacionario mostró incrementos generalizados en todos sus plazos.
Por su parte, otro destacó que los salarios de la población que incluye formales e informales no exhiben incrementos significativos en términos reales, por lo que difícilmente puede considerarse que existan presiones salariales generalizadas.