El organismo pide no restringir el comercio internacional de alimentos y fertilizantes para garantizar la seguridad alimentaria
La guerra en Ucrania contribuirá a aumentar los niveles de pobreza en América Latina este año, en que la región enfrenta presiones inflacionarias, en tanto que la la recuperación económica tras la pandemia del coronavirus se agotó, detalla la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
El conflicto ruso, la persistencia del COVID-19 y el incremento de los precios de la energía y de los alimentos han aumentado la desaceleración del ritmo de crecimiento de las economías de la región y del comercio internacional, aunado a la mayor inflación y lenta e incompleta recuperación de los mercados laborales, lo que ha aumentado la pobreza y la desigualdad, agrega el organismo con sede en Chile.
La Cepal prevé que la pobreza regional aumentará a 33.7%, es decir, 1.6 puntos porcentuales frente a 2021, mientras que la pobreza extrema avanzará a 14.9% 1.1 puntos porcentuales más que en 2021.
Necesario sostener bienestar de los más pobres
El documento, que fue presentado en una conferencia de prensa por el Secretario Ejecutivo Interino de la Cepal, Mario Cimoli, señala que, mientras la inflación anual de la región se duplicó entre 2021 y 2021 para ubicarse en 6.6%, que en abril de esta año, esa tasa se ubicó en 8.1 por ciento.
Agrega que, para contener las presiones inflacionarias, fundamentalmente impulsadas por factores de oferta, es necesario que la política monetaria utilice el más amplio espectro de herramientas disponibles, es decir, combinar el uso de la tasa de política monetaria con instrumentos macro prudenciales y cambiarios, a fin de enfrentar la inflación minimizando los efectos negativos sobre el crecimiento y la inversión.
El organismo refiere que en lo inmediato es necesario sostener el bienestar de los sectores más pobres.
“La seguridad alimentaria debe ser una prioridad, por ello, no se debe restringir el comercio internacional de alimentos y fertilizantes, de lo contrario, aceleraría la inflación y dañaría a los más pobres.
“También se deben considerar acciones como mantener o aumentar los subsidios a alimentos, implementar acuerdos de contención de precios de la canasta básica con productores y cadenas de comercialización, y reducir o eliminar aranceles a la importación de granos y otros productos básicos”, advierte.
Piden aumentar eficiencia de fertilizantes y biofertilizantes
Además, sugiere que, en el mediano plazo, son necesarias políticas agrícolas e industriales que fortalezcan el apoyo a la producción agropecuaria, así como aumentar la eficiencia en el uso de fertilizantes, priorizando los biofertilizantes.
La política industrial es clave para reducir la dependencia de la importación de fertilizantes en el mediano plazo, agrega.
Agrega que los principales efectos comerciales que el conflicto ruso ha tenido en la región son las alzas de los precios de la energía (petróleo y gas), la minería (carbón, cobre y níquel), los alimentos (trigo, maíz y aceites) y los fertilizantes, debido a la posición relevante de la Federación de Rusia y Ucrania en la producción y el comercio mundial de dichos productos.
Advierten riesgos de inseguridad alimentaria
El organismo de las Naciones Unidas también advierte de un aumento de personas en la región que enfrentarán inseguridad alimentaria.
“Estos niveles son notoriamente superiores a los observados antes de la pandemia y alejan la posibilidad de una pronta recuperación”, señala.
A fines de abril, la Cepal reportó que el PIB regional crecería un 1.8 por ciento en 2022, por debajo del 2.1 por ciento que había proyectado en enero cuando ya se preveía una desaceleración respecto al 2021.
“Dadas las repercusiones de la guerra, la tendencia anticipada se ha acentuado, lo que ha llevado a una revisión a la baja de las estimaciones”, indica.
