Ante el gobierno federal con el saldo más violento en la historia reciente del país, el 59 por ciento de los mexicanos considera que la localidad donde vive es inseguro, reveló el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Por género, resultó que 64.8 por ciento de las mujeres se sienten inseguras en el entorno donde viven, mientras que el 52.3 por ciento de los varones reportan la misma percepción.
El dato se da a conocer luego de que el gobierno federal reveló que durante 2023 fueron asesinados, en promedio, 81 mexicanos cada día en promedio.
En diciembre de 2023, las ciudades con mayor porcentaje de personas de 18 años y más que consideraron que vivir en su ciudad es inseguro fueron: Fresnillo, con 96.4 por ciento; Naucalpan de Juárez, con 91.0; Uruapan, con 89.9; Ecatepec de Morelos, con 88.7; Zacatecas, con 87.6 y Cuernavaca, con 85.7 por ciento.
En contraste, las ciudades donde la percepción de inseguridad resultó menor fueron: Benito Juárez, con 15.2 por ciento; Puerto Vallarta, con 19.4; Piedras Negras, con 20.5; Mérida, con 22.2; La Paz, con 22.4; y Los Cabos, con 23.2 por ciento.
¿Qué espacios o lugares son los más inseguros?
De acuerdo a la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU), que realizó el INEGI en el cuarto trimestre de 2023, resultó que los cajeros automáticos localizados en la vía pública son donde los mexicanos se sienten más inseguros (70.6 por ciento de los encuestados), seguido del transporte público (64.1); los bancos (55); así como las calles que por las cuales habitualmente transitan (53.2 por ciento).
Durante el cuarto trimestre de 2023, los resultados de la ensu revelaron que, de las conductas delictivas o antisociales que la población mencionó haber visto o escuchado en los alrededores de su vivienda, 60.0 % se relacionó con consumo de alcohol en las calles; 50.2 por ciento, con robos o asaltos; 39.1, con venta o consumo de drogas; 39.1 por ciento, con vandalismo en las viviendas o negocios; 38.0, con disparos frecuentes con armas; 24.2, con bandas violentas o pandillerismo y 14.1 por ciento, con tomas irregulares de luz (diablitos). Finalmente, 3.3 por ciento de estas conductas se relacionó con robo o venta ilegal de gasolina o diésel (huachicol).
