Carlos Slim es dueño de una infinidad de negocios, entre ellos, cuenta con una cadena hotelera

Redacción

El empresario Carlos Slim ha logrado convertirse en la persona con más dinero en México gracias a la habilidad que tiene a la hora de cerrar negocios y escoger las mejores opciones. El magnate cuenta con una fortuna, según la revista estadounidense especializada en temas financieros Forbes, estimada en USD 55 mil 930 millones.

Slim tiene diversos negocios de varios giros, como Grupo Carso, América Móvil y Telmex. Sin embargo, el magnate también ha incursionado en otros negocios, como la hotelería, pues es dueño de la cadena Ostar. Fue a principios de la década de los años 90 cuando Carso compró los hoteles Calinda, una marca que venía a la baja, debido a la disparidad de sus propiedades, con inmuebles que tenían un gran prestigio y otros de menor categoría.

La cadena de hoteles incluye una gran cantidad de inmuebles, uno de estos es el Geneve, ubicado en la Colonia Juárez, en la Ciudad de México. El hotel se encuentra en el corazón de la conocida como Zona Rosa, sobre la calle de Londres, a un par de calles de la Glorieta de los Insurgentes. El lujoso inmueble también es parte de la historia de la Ciudad de México, pues fue construido en 1897 por los hermanos Gore, y abrió sus puertas por primera vez en 1907. Dicho hotel se ha renovado para alcanzar una meta tan clara como ambiciosa: la de convertirse en un referente turístico de la capital mexicana.

El hotel era considerado un ícono a finales del siglo XIX y principios del XX por ser el primero en implementar los estándares de confort que poseen ahora los grandes hospedajes. Cada habitación ya contaba con baño completo con ducha, lavabo y sanitario, pero sin las jarras de agua propias de la época. Contaban con llave de agua caliente y fría, y espacios más amplios que los que ofrecían los hoteles europeos de esa época.

Grupo Ostar hizo una gran restauración del hotel que implicó la remodelación de todo el equipo. De las calderas que trabajan a base de petróleo, lavanderías de madera, y tubería de cobre, se modificó a sistemas modernos. La única norma que se tenía a la hora de la restauración era respetar el estilo clásico europeo con el que se contaba desde un inicio.

Grupo Carso Inmobiliario adquirió Grupo Calinda en 1991, reestructuró la cadena, y en 2007 vendió todos sus activos, excepto seis hoteles ancla bajo la marca Ostar Grupo Hotelero, entre ellos, el Geneve. Desde entonces, la preocupación del director del Grupo, Roberto Slim Seade, ha sido devolverle al inmueble su apariencia original.

En la restauración del hotel se cuidaron los tonos y los acabados conforme a la época de su creación, vitrales de plomo, pavimentos de mármol, así como herrajes originales que se conservan y dan un concepto absolutamente diferente al hotel.

Además de ser labrados a mano, los muebles están fabricados en madera de caoba y cedro rojo, y sus cajones se ensamblaron mediante cola de Milán sin la necesidad de utilizar un solo clavo.

La arquitectura y decoración del hotel evoca el estilo clásico europeo, y los visitantes descubren a su paso antigüedades y algunas obras de arte que han sido parte de la historia del hotel-museo.

Además, desde sus inicios, el Geneve fue innovador inalcanzable en el ramo turístico, pues fue el primer hotel en el país en ofrecer el servicio de taxis, operadora, tintorería, agencia de viajes, elevador, cancha de tenis y peluquería, así como teléfono y baño en cada habitación, servicios muy exclusivos en ese momento. Con una industria turística muy rudimentaria en el país, este era el hotel más moderno y elegante que ofrecía un sistema de hotelería bastante europeo, un concepto muy novedoso que no se conocía en México.

Otro dato interesante del hotel, es que Porfirio Díaz se encontraba desayunando en éste, cuando se enteró que había estallado la Revolución Mexicana.