1. Recuerda que cuando te atacan con un arma blanca que cada minuto cuenta, ya que el agresor puede aprovecharse de tu temor y duda para usarla a su favor.
  2.  Cuando te atacan con un arma blanca, debes salir de la línea de ataque del agresor, muévete a los lados y cuida que tu abdomen quede fuera del alcance del arma.
  3. Una patada en el abdomen o genitales del agresor, puede darte tiempo para huir.
  4. Grita todo el tiempo. Haz el mayor ruido posible. Eso puede ahuyentar al agresor.
  5. Si logras tomar la mano del agresor con la que porta el arma, lo debes hacer para no soltarla; por el contrario, trata de fracturar o luxar su muñeca. Eso lo hará caer y podrás huir.
  6. Cada movimiento es importante, este último en particular debe ser sumamente veloz ya que solo contamos con una fracción de segundos.
  7. Practicar es el único método por el cual se puede conseguir ganar confianza y estar más preparado. Hazlo con una persona de tu confianza; así aprenderán los dos.