
En toda política industrial hay tres ejes sustanciales para que su implementación resulte exitosa: escala de producción, incentivos y precios de los bienes finales que garanticen una tasa media de retorno aceptable. Sin duda son positivos los deseos de Claudia Sheinbaum y del secretario de salud David Kershenobich al emitir un decreto que busca atraer a México a fabricantes mundiales de medicamentos e insumos de la salud… pero el primer elemento de certidumbre económica para ello sería pagar los 20 mil millones de pesos que adeuda el sector público a fabricantes y distribuidores.
El decreto presidencial se apoya en primera instancia en la compra consolidada y multianual de clínicas y hospitales públicos que sumaría 300 mil millones de pesos… pero esa compra lleva ya 7 meses de rezago, una cancelación general de la compra y la implementación urgente de soluciones improvisadas que tras una serie de diferimientos apenas ayer empezó a emitir fallos para ordenar la compra urgente de 575 claves de insumos a precios super castigados. Por algo Eduardo Clark es conocido como el subsecretario del desabasto… y por ello la industria le ha hecho petición formal al secretario de hacienda Edgar Amador el pago de los abultados adeudos.

Los precios castigados, en especial de medicamentos genéricos, no son ni por cerca un estímulo para las empresas nacionales y foráneas con planta en México agrupadas en la CANIFARMA que encabeza Guillermo Funes. De hecho, son lo contrario. El decreto presidencial, por lo tanto, tendría que contener auténticos estímulos fiscales como depreciación acelerada de activos, diferimientos de Impuesto sobre la Renta y al Valor Agregado, carga social; y para la venta en México, un esquema eficiente de devolución de IVA por importación virtual de productos terminados que haga posible la entrada al país de sales y precursores que hoy se fabrican en India, China y Corea del Sur.
Los incentivos son una pieza clave pero no la única para que grandes fabricantes de insumos fármaco-químicos y farmacéuticas opten por plantas en México: Pfizer, Roché, Novartis o Sun Pharmaceutical, Dr. Reddy’s Laboratories o Lupin requieren contar con acceso no a un mercado nacional, sino a uno continental para desarrollar una planta donde se procesan productos cuyo desarrollo significa inversiones de hasta 2,500 millones de dólares cada uno.
Y para que un país pueda ser la cede de esas macro inversiones requiere cuatro cosas básicas: energía, agua, infraestructura logística y estado de derecho… todos ellos escasos en el México de hoy.

Peligro motorizado a ritmo de samba
Pues México no se salva de las afanosas garras de la ultraderecha brasileña: arribó a estos lares Thiago De Magalhaes, quien con solo 27 años de edad se colocó en la dirección de flotillas, asesoría y venta del Grupo Surman, de Yussef Mansur, pues hasta hace unos meses así lo presumía en su perfil de LinkedIn.
Aunque el personaje con lazos familiares en la criticada corriente autoritarista no se abre paso mediante la vía política, sí lo hace mediante el ámbito empresarial, pues sería el encargado de conseguirle contratos a Grupo Surman por medio del acercamiento con distintas dependencias gubernamentales, entre ellas anote a la Defensa Nacional, de Ricardo Trevilla. En el historial de la firma se identifica una inhabilitación para celebrar convenios públicos contra Surman Poniente, la cual presentó papeles falsos para convertirse en proveedora de la Secretaría de Turismo, entonces al mando de Miguel Torruco.
A ver sí el ejército no se mete en bache enlodado.

Aeroméxico y el pleito dentro de ASSA
El domingo fue que la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación solicitó al Tribunal Laboral Federal de Asuntos Colectivos una prórroga de 10 días antes de estallar presuntamente una huelga en Aeroméxico y seguir negociando. Por lo que se conoce en los espacios digitales de ese ramo (cómo el blog sobrecargo informa), todo indica que existe un problema de liderazgo al interior de esa asociación pues abundan las quejas y denuncias contra la secretaria general, Hermelinda Salazar, por no encabezar las negociaciones con la aerolínea, así como denuncias por acoso y presunto desvío de recursos.
En los siguientes días la firma que dirige Andrés Conesa mantendrá la negociación en base a los criterios que mantengan la sostenibilidad de la fuente de empleo, incluyendo condiciones de trabajo que, dicho sea de paso, son de las más robustas en el sector de servicios.

Poder de Judicial y el error de Jolopo
Con sólo 12% de participación del electorado, o sea con un abstencionismo de 88% de los ciudadanos, con poco menos de 10 millones de sufragios, la kafkiana elección del pddoer judicial carece de legitimidad política… y evoca a esa pérdida de legitimidad con que ganó José López Portillo las elecciones presidenciales de 1976 siendo candidato único de un partido hegemónico.
Entre sus tantas y disparatadas decisiones, a López Portillo se le recuerda por la expropiación de la banca nacional (le llamaron nacionalización) que en medio del llanto y frases estentóreas, entró de lleno a la llamada “Década Pérdida” que incluyó la destrucción de un sistema de banca múltiple en crecimiento.
De esa magnitud, pero probablemente de mayor duración, sean los efectos de la supresión de poderes que ideó Andrés Manuel López Obrador.
Los efectos están ya a la vista.
@mfloresarellano
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