Las economías de México y Estados Unidos se verán ampliamente afectadas al dejar de comprar maíz genéticamente modificado (GM) a nuestro principal socio comercial, a partir de 2024; además se empeorará la seguridad alimentaria de los mexicanos y se encarecerían los precios para el consumidor, revela un informe elaborado por World Perspectives, Inc.
En el estudio financiado por las principales empresas alimentarias y de agroquímicos en México y Estados Unidos señala: “las restricciones propuestas tendrían un impacto adverso en la seguridad alimentaria en América del Norte y elevarían los precios al consumidor del maíz, los alimentos básicos y otros productos críticos derivados del maíz, particularmente en México”.
El principal impacto para México por dejar de importar maíz biotecnológico a Estados Unidos, agrega el Informe, sería la falta de materia prima para la industria y podría caer el PIB nacional 11 mil 720 millones de dólares en 10 años; la producción económica se reduciría en 19 mil 390 millones de dólares. Adicionalmente, habría una pérdida anual de 56 mil 958 empleos.
También advierte que, de implementar México las restricciones a la compra de maíz GM, el costo promedio de éste aumentaría 19%, mientras que la tortilla se incrementaría 16% en promedio.
Según el Informe, México tendría que pagar 571 millones de dólares adicionales por el maíz importado, al primer año de que se deje de importar maíz GM, ya que los precios del maíz no transgénico aumentarían 48% a 8,14 dólares por bushel.
Pecuarios usan maíz transgénico
En opinión del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), en promedio el 10% de la población mexicana carece de acceso a una alimentación adecuada y al prohibirse la compra de maíz transgénico, ese porcentaje se podría duplicar o triplique en los nueve estados mexicanos más pobres. La razón es que el decil más bajo gasta 52% de sus ingresos en alimentos.
Las restricciones de compra y comercialización de maíz transgénico en México, también significarían importantes pérdidas para la economía de Estados Unidos, tan solo la producción se afectaría en 73 mil 890 millones de dólares y en 10 años, el PIB se contraería 30 mil 055 millones de dólares. Adicionalmente, se perderían 32 mil 217 empleos.
En este sentido, agrega el reporte que, las afectaciones estadounidenses recaerían en la molienda húmeda de maíz, caída de ingresos agrícolas e industrias ferroviaria y del etanol.
“El comercio internacional es una parte esencial de la actividad económica de Estados Unidos: apoya millones de empleos estadounidenses, impulsa el crecimiento económico y aumenta la competitividad global”, dijo el presidente y CEO de la Asociación de Refinadores de Maíz, John Bode.
Par este año se prevé que México importe alrededor de 18 millones de toneladas de maíz amarillo, principalmente de Estados Unidos, dicho grano permite atender las necesidades del sector pecuario.
Prevén alzas en proteína animal
En este sentido, World Perspectives, Inc., anticipa que la producción ganadera mexicana disminuiría 1.2% anual en promedio. En tanto, la producción avícola mexicana caería 17% en total mientras que la producción porcina se contraería 13%.
Un panorama similar prevé para los sectores de la carne de vacuno y los productos lácteos, cuyas industrias caerían 9% y 8%, respectivamente.
En tanto, para el consumo de huevo en las poblaciones más pobres de México, considera que su consumo se convertiría en un artículo de lujo y causar la primera caída en la demanda de este producto desde 2017.
Dichos impactos exacerbarán la inflación de los precios de los alimentos para los consumidores más vulnerables al interrumpir las cadenas de suministro e impedir el acceso de los productores a nuevas tecnologías para aumentar los rendimientos”, agregó la Dra. Michelle McMurry-Heath, presidenta y directora Ejecutiva de BIO.
Los representantes de las empresas que patrocinaron el estudio llamaron a México a que regrese a evaluaciones de riesgos oportunas y basadas en la ciencia de los rasgos biotecnológicos de los productos agrícolas, de conformidad con sus obligaciones comerciales internacionales, para garantizar que los productores tengan acceso a las tecnologías necesarias para fortalecer la seguridad alimentaria, mejorar la sostenibilidad y enfrentar el cambio climático
Los patrocinadores del estudio incluyen el Consejo Nacional de Agricultura de México, el Consejo de Granos de los Estados Unidos, la Asociación Nacional de Departamentos Estatales de Agricultura, la Asociación Nacional de Productores de Maíz, la Organización de Innovación en Biotecnología (BIO), CropLife America, la Asociación de Refinadores de Maíz, la Asociación Mexicana de Comederos de Ganado Bovino Ac., la Asociación Agrícola Local de Matamoros, AC, asociación de proveedores de productos agrícolas de México, AC (Appamex), Asociación Mexicana de Semillas, AC (Amsac), Asociación Nacional de Fabricantes de Alimentos para Consumo Animal, SC (Anfaca), Cámara Nacional de Maíz Industrializado (Canami), Consejo Nacional de Fabricantes de Alimentos Balanceados y Nutrición Animal, AC (Conafab), Ciencia y Tecnología de Protección de Cultivos, AC (Proccyt), Unificación Porcina Nacional, Ac (Opormex), Unión Mexicana de Fabricantes y Formuladores de Agroquímicos, Ac (Umffaac), Asociación Mexicana de Productores de Alimentos, AC (Amepa).
Las economías de México y Estados Unidos se verán ampliamente afectadas al dejar de comprar maíz genéticamente modificado (GM) a nuestro principal socio comercial, a partir de 2024; además se empeorará la seguridad alimentaria de los mexicanos y se encarecerían los precios para el consumidor, revela un informe elaborado por World Perspectives, Inc.
En el estudio financiado por las principales empresas alimentarias y de agroquímicos en México y Estados Unidos señala: “las restricciones propuestas tendrían un impacto adverso en la seguridad alimentaria en América del Norte y elevarían los precios al consumidor del maíz, los alimentos básicos y otros productos críticos derivados del maíz, particularmente en México”.
El principal impacto para México por dejar de importar maíz biotecnológico a Estados Unidos, agrega el Informe, sería la falta de materia prima para la industria y podría caer el PIB nacional 11 mil 720 millones de dólares en 10 años; la producción económica se reduciría en 19 mil 390 millones de dólares. Adicionalmente, habría una pérdida anual de 56 mil 958 empleos.
También advierte que, de implementar México las restricciones a la compra de maíz GM, el costo promedio de éste aumentaría 19%, mientras que la tortilla se incrementaría 16% en promedio.
Según el Informe, México tendría que pagar 571 millones de dólares adicionales por el maíz importado, al primer año de que se deje de importar maíz GM, ya que los precios del maíz no transgénico aumentarían 48% a 8,14 dólares por bushel.
Pecuarios usan maíz transgénico
En opinión del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), en promedio el 10% de la población mexicana carece de acceso a una alimentación adecuada y al prohibirse la compra de maíz transgénico, ese porcentaje se podría duplicar o triplique en los nueve estados mexicanos más pobres. La razón es que el decil más bajo gasta 52% de sus ingresos en alimentos.
Las restricciones de compra y comercialización de maíz transgénico en México, también significarían importantes pérdidas para la economía de Estados Unidos, tan solo la producción se afectaría en 73 mil 890 millones de dólares y en 10 años, el PIB se contraería 30 mil 055 millones de dólares. Adicionalmente, se perderían 32 mil 217 empleos.
En este sentido, agrega el reporte que, las afectaciones estadounidenses recaerían en la molienda húmeda de maíz, caída de ingresos agrícolas e industrias ferroviaria y del etanol.
“El comercio internacional es una parte esencial de la actividad económica de Estados Unidos: apoya millones de empleos estadounidenses, impulsa el crecimiento económico y aumenta la competitividad global”, dijo el presidente y CEO de la Asociación de Refinadores de Maíz, John Bode.
Par este año se prevé que México importe alrededor de 18 millones de toneladas de maíz amarillo, principalmente de Estados Unidos, dicho grano permite atender las necesidades del sector pecuario.
Prevén alzas en proteína animal
En este sentido, World Perspectives, Inc., anticipa que la producción ganadera mexicana disminuiría 1.2% anual en promedio. En tanto, la producción avícola mexicana caería 17% en total mientras que la producción porcina se contraería 13%.
Un panorama similar prevé para los sectores de la carne de vacuno y los productos lácteos, cuyas industrias caerían 9% y 8%, respectivamente.
En tanto, para el consumo de huevo en las poblaciones más pobres de México, considera que su consumo se convertiría en un artículo de lujo y causar la primera caída en la demanda de este producto desde 2017.
Dichos impactos exacerbarán la inflación de los precios de los alimentos para los consumidores más vulnerables al interrumpir las cadenas de suministro e impedir el acceso de los productores a nuevas tecnologías para aumentar los rendimientos”, agregó la Dra. Michelle McMurry-Heath, presidenta y directora Ejecutiva de BIO.
Los representantes de las empresas que patrocinaron el estudio llamaron a México a que regrese a evaluaciones de riesgos oportunas y basadas en la ciencia de los rasgos biotecnológicos de los productos agrícolas, de conformidad con sus obligaciones comerciales internacionales, para garantizar que los productores tengan acceso a las tecnologías necesarias para fortalecer la seguridad alimentaria, mejorar la sostenibilidad y enfrentar el cambio climático
Los patrocinadores del estudio incluyen el Consejo Nacional de Agricultura de México, el Consejo de Granos de los Estados Unidos, la Asociación Nacional de Departamentos Estatales de Agricultura, la Asociación Nacional de Productores de Maíz, la Organización de Innovación en Biotecnología (BIO), CropLife America, la Asociación de Refinadores de Maíz, la Asociación Mexicana de Comederos de Ganado Bovino Ac., la Asociación Agrícola Local de Matamoros, AC, asociación de proveedores de productos agrícolas de México, AC (Appamex), Asociación Mexicana de Semillas, AC (Amsac), Asociación Nacional de Fabricantes de Alimentos para Consumo Animal, SC (Anfaca), Cámara Nacional de Maíz Industrializado (Canami), Consejo Nacional de Fabricantes de Alimentos Balanceados y Nutrición Animal, AC (Conafab), Ciencia y Tecnología de Protección de Cultivos, AC (Proccyt), Unificación Porcina Nacional, Ac (Opormex), Unión Mexicana de Fabricantes y Formuladores de Agroquímicos, Ac (Umffaac), Asociación Mexicana de Productores de Alimentos, AC (Amepa).
