Por Diana Domínguez Galván
La Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (Anpact) denunció el crecimiento mayor al 30 por ciento en la importación de vehículos chatarra durante el primer semestre del año, en comparación con igual periodo del año anterior.
El organismo que dirige Miguel Elizalde, informó que tan sólo en junio pasado entraron al país 809 unidadaes pesadas usadas, que comparadas con las 693 que ingresaron en igual periodo del año 2020, representó un incremento del 16.7 por ciento, con una importante participación de vehículos de carga de cinco a 20 toneladas a diésel, que creció 91.3 por ciento en ese periodo.
Así es como durante el primer semestre de 2021 se importaron cinco mil 422 unidades chatarra, procedentes principalmente de Estados Unidos, lo que representó un creicmiento de 31.1 por ciento, respecto a los cuatro mil 137 que se importaron en igual periodo del año 2020.
“De 2009 a 2021 se han importado un total de 125 mil 783 unidades”, siendo el semestre de 2021 el de mayor importación de vehìculos usados importadorsen los últimos seis años, lo que se reflejó en una sustancial disminución de vehículos nuevos a los distribuidores de tan sólo 14 mil 602 unidades en el mismo periodo.
El presidente ejecutivo de Anpact, Miguel Elizalde, comentó al respecto que “la cifra de importación de vehículos usados durante el primer semestre, es la más alta desde 2015, año en que dejaron de importarse vehículos con amparo, lo que hace necesario revertir esa tendencia de manera urgente, por las afectaciones a la industria, a la generación de empleo, a las cadenas productivas y al medio ambiente”.
La importación de vehículos chatarra en lo que va del año representa más de un tercio de las ventas al menudeo realizadas durante el primer semestre de 2021.
“Cada camión chatarra es importar un problema, por falta de competitividad, inseguridad e incremento de emisiones”, afirmó Elizalde.
“La seguridad vial es un aspecto de suma relevancia para lograr una movilidad incluyente, por ello estamos trabajando con instancias del Congreso para fortalecer e impulsar el proyecto de la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial y la norma de dispositivos de seguridad. Los vehículos importados usados, en muchos de los casos, no cumplen con las características requeridas en términos de seguridad para cuidar la integridad de los pasajeros. Es importante atender este ángulo de la problemática”, agregó.
“Tenemos que trabajar de forma paralela en reducir la importación de vehículos usados y fomentar la renovación vehicular. Sólo de esta forma podemos consolidar la reactivación económica y detonar una movilidad incluyente para las ciudades del país”, finalizó.