*Espera Sodexo el aval de la CNBV para operar como Fintech.
En aras de ser más competitivos y diferenciarse., “tarde o temprano” todas las empresas tendrán que subirse al tren de la digitalización y automatizar sus servicios en beneficio de su ecosistema e implementando plataformas que es el desafío más grande y con ello, coadyuvar al mercado laboral mexicano que hoy muestra signos muy positivos, aseguró Carlos Ferrer Marulanda, director general de Sodexo en México.
En conferencia de prensa, para dar a conocer las tendencias de la industria de beneficios e incentivos decisivos para el escenario laboral en México, precisó que los cambios que trajo consigo la pandemia de Covid-19 con el concepto de virtualidad, la ampliación de días de vacaciones para los trabajadores, la flexibilidad laboral y las exigencias de los mercados globales con el rompimiento de las cadenas de suministros , abren una gran oportunidad para México por su capacidad industrial, su emprendimiento y su capacidad económica y de inversiones que se prevé se tengan con el nearshoring y con Tesla en Nuevo León.
“Todas las organizaciones tienen que entrar tarde o temprano en un proceso de transformación digital y de evolución tecnológica para ser realmente muy competitivos y diferenciarse en el mercado sino terminamos siendo puros commodities. Al final una de las grandes diferenciaciones es cómo aprovechamos la información para poder entender un poco el ecosistema en el cual nosotros interactuamos ya sea el de los clientes o los consumidores o los comercios sus necesidades e intereses, etcétera, y llegamos de una manera más asertiva”, indicó.
Agregó que cuando se habla del tema del big data o tecnologías de machine learning o de robotización, lo que se hace es crear a través de software lenguajes predictivos que aprendan de la información que se les da y la automatización no suplantará las labores del ser humano porque simplifica los procesos repetitivos que las personas hacen para poder interactuar o analizar la situación que tienen a la mano.
El CEO de Sodexo que en el país cuenta con 2 millones de beneficiarios, expuso que en la firma multinacional que representa, en los últimos dos años ha automatizado 250 procesos pues hay una transformación digital profunda para que la compañía pueda utilizar la información de la manera más adecuada en beneficio de su ecosistema.
“En la medida en que hacer uso de la data de manera inteligente se vuelve un gran activo porque te permite tomar decisiones inteligentes en bien de tu negocio y la primera etapa en la que estamos ahorita es en toda la digitalización, automatización y análisis de la información que tienen las compañías para poder tomar decisiones proactivas y positivas. Ahí, creo que el impacto en la fuerza laboral va a ser mínima y claro que la robotización es la parte de la manufactura, ahí hay un impacto importante que lo que hace es que se tengan que incrementar las habilidades de las personas que trabajan en esas plantas para poder manejar la tecnología”, dijo.
Ferrer Marulanda, añadió que quienes no entren en ese proceso de aprendizaje y desarrollo podrían ser parte de una natural rotación de personal donde vendrá gente con habilidades y se irá quién no las tenga para ocuparse de otros cargos “ pero no veo un gran riesgo en el acceso a posibilidades laborales en México en el corto plazo” pero si una demanda de entrenamiento, capacitación de las compañías o las empresas y también de las universidades , los institutos tecnológicos y más que tendrán que desarrollar ese tipo de habilidades.
Por otro lado, tras señalar que en México Sodexo registra en los últimos 7 años crecimientos positivos, dijo esperar a que sea cuestión de días para que la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) les de la autorización para operar como Fintech lo que les ayudará a expandir su propuesta de valor con sus clientes y ecosistemas.
Esto es, contar con la regulación para poder generar productos nuevos en el mercado como monederos electrónicos, cuentas empresariales y un mundo de oportunidades, especialmente para segmentos muy positivos o aquellos donde la banca comercial no da acceso o no les apoya.
