Con una baja participación ciudadana de entre el 12,57 % y el 13,32 % México celebró este domingo su primera elección judicial, en donde se pusieron en juego 2.681 cargos del poder judicial entre miles de candidatos, y en la que no se conocerán los resultados oficiales hasta dentro de unos diez días.
“A partir de una muestra de casillas (centros de votación) seccionales seleccionadas aleatoriamente frente a notarios públicos los resultados obtenidos por los especialistas arrojaron un resultado estimado de participación ciudadana del 12,57 % al 13,32 %”, señaló en un mensaje a medios la consejera presidenta del Instituto Nacional Electoral (INE), Guadalupe Taddei.
La histórica elección, en la que se eligieron por voto directo a jueces, magistrados y ministros tanto a nivel federal como en 19 estados del país, representa el cambio más profundo en la judicatura en las últimas tres décadas por lo que la baja participación del electorado supone un revés para la presidenta, Claudia Sheinbaum, quien había impulsado la propuesta.

México celebró este domingo la “histórica” elección al poder judicial y comenzó el largo conteo de los resultados, cuyo cómputo definitivo no se conocerá hasta dentro de dos semanas, pero que apunta a una participación de apenas el 13 %, en un notable revés a la presidenta, Claudia Sheinbaum, impulsora de la iniciativa.
“A partir de una muestra de casillas (centros de votación) seccionales seleccionadas aleatoriamente frente a notarios públicos los resultados obtenidos por los especialistas arrojaron un resultado estimado de participación ciudadana del 12,57 % al 13,32 % de participación”, señaló en un mensaje a medios la consejera presidenta del Instituto Nacional Electoral (INE), Guadalupe Taddei.
Los comicios, en los que se eligió por voto directo a jueces, magistrados y ministros tanto a nivel federal como en 19 estados del país, representan el cambio más profundo a la judicatura en las últimas tres décadas, por lo que la baja participación del electorado supone una derrota para Sheinbaum, quien había llamado a una votación “masiva”.
La mandataria estimaba alcanzar el 20 % de participación, para superar el 17,77 % de la consulta de revocación de mandato que realizó el expresidente Andrés Manuel López Obrador (2018-2024) en 2022.
No obstante, en un mensaje en sus redes sociales minutos después de que el INE informase de los datos de participación, Sheinbaum, que llegó al poder en octubre de 2024, celebró la jornada como un triunfo.

“La elección histórica del poder judicial del 1 de junio de 2025 ha sido todo un éxito. Cerca de 13 millones de mexicanos y mexicanas salieron a ejercer por primera vez en la historia quiénes deben ser los ministros magistrados y jueces”, aseguró.
Sheinbaum remarcó que “el actual poder judicial ha sido responsable de favorecer a miembros de la delincuencia organizada” y aseguró que está plagado de “nepotismo”.
Celebró, por contra, que la jornada electoral del domingo fue “transparente, las campañas austeras y el voto libre”.
“Si quisiéramos cambiar al Poder Judicial para controlarlo, ¿qué sentido tendría hacer una elección universal? Mejor hubiésemos cambiado la Constitución para poner ministros a modo (…) Sí, México es el país más democrático del mundo”, remarcó.
Jornada sin incidentes
La jornada electoral, en la que casi 100 millones de ciudadanos estaban convocados a las urnas, discurrió “de manera ordenada” y sin incidentes significativos, según el INE.
Los mexicanos acudieron a los centros de votación para participar en la primera elección popular de jueces y magistrados, en un día que estuvo marcado tanto por el entusiasmo del ejercicio democrático como por la confusión por la complejidad del proceso y algunas protestas que la acusan de intentar politizar la justicia.

En la capital mexicana, Remedios Torres, una votante de 30 años, señaló que acudió a votar “por responsabilidad”, pese a considerar que era una “pérdida de tiempo” y criticar la compleja la votación ya que había “demasiados nombres” en las boletas.
El país norteamericano tuvo su primera elección popular para seleccionar entre más de 3.400 candidaturas para renovar 881 puestos judiciales federales, incluida la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), además de cientos de cargos locales.
El proceso ha sido cuestionado por sectores académicos, organismos internacionales y asociaciones judiciales por la complejidad y falta de información entre los votantes, así como el riesgo de la infiltración del crimen organizado en el poder judicial.