El ‘huachigas’ provocó que la industria formal del gas LP en México sufriera pérdidas por 13 mil 200 millones de pesos durante 2022, señaló Luis Landeros, presidente de la Asociación de Distribuidores de Gas (ADG).

El directivo explicó que, durante el año pasado, el mercado ilícito sustrajo alrededor de 60-80 mil toneladas de gas doméstico.

“El comercio formal ha venido a menos, especialmente en la zona metropolitana del país, las empresas legalmente establecidas cada vez ganan menos porque no pueden competir con el mercado ilícito”, dijo el presidente de la ADG durante la inauguración del 36° Congreso de la AIGLP.

Incluso, el presidente de ADG calculó que entre el 15 y el 20 por ciento de los distribuidores de gas LP de la zona metropolitana del país es mercado ilícito.

“El consumidor final, sin saberlo, está consumiendo gas que fue ordeñado de un ducto, hemos detectado que existen alrededor de 800 estaciones de carburación de gas LP en la zona metropolitana; sin embargo, sólo hay alrededor de 400 que cuentan con permisos por parte de la Comisión Reguladora de Energía (CRE)”, denunció.

Landeros consideró que el principal problema del “huachigas” se encuentra en el ‘triángulo rojo’, conformado por los estados de Puebla, Tlaxcala, Hidalgo y Estado de México, “ya que por estas entidades pasa el ducto y están muy cerca de la Ciudad de México, que es el mercado más importante del país”.

Por si fuera poco, la industria del gas LP también adolecerá de una ‘parálisis regulatoria’, ya que el nuevo orden de prelación establecido por la CRE desde el pasado 1 de marzo provocará que la aprobación de nuevos permisos lleve años.

“Nosotros estimamos que hay alrededor de 2 mil permisos rezagados en la fila, si la CRE aprueba 50 permisos al mes entre hidrocarburos, petrolíferos, ¿cuántos nos van a tocar nosotros?, probablemente diez, que es lo que ha estado sucediendo en las últimas sesiones de la CRE, nos va a llevar varios años sin poder regularizarnos”, subrayó Luis Landeros.

Por otra parte, David Aguilar Romero, coordinador general de educación y divulgación de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), indicó que desde que se implementaron los precios máximos en el gas LP, se ha logrado cumplir la meta de no incrementar los precios por arriba de la inflación general.

“Incluso, durante la actual administración, el precio del gas LP se ha mantenido con una disminución promedio de 13 por ciento”, dijo.

Semanalmente, la Profeco realiza 800 visitas a empresas comercializadoras de gas para verificar que cumplan con los precios máximos.

“Sólo tenemos registros de que poco más de 10 empresas en todo el país no han respetado los precios máximos, y los que han incumplido han sido sancionados”, afirmó.

En tanto, Ricardo Tonietto, presidente de la AIGLP, afirmó que a pesar de que el COVID-19 y la guerra en Ucrania afectaron de manera importante a la industria del gas LP, la industria mostró su fuerza y resiliencia para adaptarse a los nuevos cambios.

“Tenemos que combatir la pobreza energética, en América Latina aún hay lugares que usan leña para cocinar, lo que trae enormes perjuicios para la salud, tenemos que combatir esta situación”, afirmó.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), alrededor de 4 millones de mexicanos aún utilizan leña para preparar alimentos.