El presidencia municipal de Zinacatepec colocó la estatua en la tierra natal del gobernador Miguel Barbosa.

Red de corresponsales

Al presidente municipal de Zinacatepec, Manuel Vilchis Viveros, le pareció buena idea mandar a inmortalizar a su paisano: el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, en una estatua de bronce. La mandó a colocar en la explanada de la presidencia el fin de semana.

Sin embargo, no notificó al mandatario local. Barbosa se enteró a raíz de que comenzaron a circular las imágenes en redes sociales y usuarios comenzaron a cuestionar que haya resultado igual que gobernadores anteriores que se mandaron a glorificar en murales y en obras públicas.

“Las mal intencionadas, esas que consumen ayahuasca, los mal intensionados, dicen que yo develé una estatua con mi fugura. Ahora, hasta un periódico nacional que me tiene malas creencias, ahí en el periódico Eje Central, saca una nota. Lo invito, lo invito a que venga el señor (Raymundo) Riva Palacio acá a Casa Aguayo. Que le diga a sus reporteros que cercioren los datos de sus notas”, dijo en un video que difundió en sus redes sociales.

Barbosa salió a desmentir de esta forma que había mandado a construir una escultura suya.

Hasta en ese momento, algunos medios y usuarios de redes sociales habían afirmado que esta escultura se ubicaba en Casa Aguayo, sede del Poder Ejecutivo en la ciudad de Puebla. Hubo quienes aseguraron que incluso Barbosa Huerta la había develado.

“Cómo creen que una persona como yo pueda pensar en develar una estatua de su figura. Nunca. El poder es transitorio. El poder es servir a la gente, es cumplir con la ley y no es provocar una alabanza propia”, destacó en la grabación en la que mostró los rincones de la casa que alberga su oficina como una forma de demostrar que ahí no existía ningún culto a su personalidad.

Sin embargo, a las 19:45 horas, publicó un par de tuits en los que informaba que sí, que la escultura sí existe, pero en Zinacatepec –en la Sierra Negra de Puebla de donde es originario–.

“Esta noche me enteré de la reciente colocación de una estatua alusiva a mi persona colocada en la explanada en la presidencia municipal de Zinacatepec, lo cual fue resuelto por acuerdo de su Cabildo. Yo lo ignoraba hasta este momento. Agradezco la intención del ayuntamiento, pero he solicitado su retiro inmediato porque no comparto la idea del culto a la personalidad de los políticos y gobernantes. Me considero una persona madura, seria y responsable. Soy un hombre congruente”, informó.

En diversas ocasiones, Barbosa ha criticado este tipo de prácticas y considera que su gobierno llegó a terminar con este tipo de “fantocherías”.

El culto a la personalidad de gobernadores anteriores

La crítica constante de Barbosa se había dado debido a que así ocurría en pasadas administraciones cuando los gobernadores en turno bautizaban los inmuebles públicos con sus nombres o hasta en obras emblemáticas mandaban a poner los iniciales, como ocurrió con el exgobernador Rafael Moreno Valle y los puentes atirantados.

Incluso el exgobernador Mario Marín (2005-2011) mandó a pintar su rostro en un mural histórico en el salón de protocolos del Ayuntamiento de Puebla, pero en junio de 2013 fue borrado por el pintor poblano Fernando Rodríguez Lago.