El Congreso del estado de México aprobó reformas al Código Penal de la entidad para tipificar como delito el robo del agua.
Red de corresponsales
Y castigarlo hasta con ocho años de prisión. Diputados locales del partido Morena aseguraron que esta práctica genera ganancias anuales por mil millones de pesos sólo en el municipio de Ecatepec.
Los diputados morenistas por Ecatepec Elba Aldana, Azucena Cisneros, Luz María Hernández, Daniel Sibaja y Faustino de la Cruz impulsaron la iniciativa citada con la finalidad de frenar la sustracción de agua potable de la infraestructura hidráulica en su municipio y en otros del valle de México.
Las modificaciones al Código Penal mexiquense se aprobaron por unanimidad. Estipulan que quien distribuya o suministre agua potable a través de pipas u otro medio de almacenamiento sin contar con permiso de distribución o la evaluación correspondiente expedidos por la autoridad, con la finalidad de obtener un beneficio económico, recibirá sentencia de dos a seis años de prisión, así como una multa de 50 a 200 unidades de medida y actualización (UMA).
A quien distribuya agua potable a través de pipas y la extraiga u obtenga de una fuente de abastecimiento diversa a la autorizada se le impondrán de uno a tres años de prisión y sanción de 25 a 100 UMA; mientras, enfrentará pena de dos a seis años de prisión quien altere, impida o restrinja el flujo de agua.
Las penas señaladas se incrementarán con una mitad adicional a los servidores públicos que dispongan, supervisen, controlen, manejen, o por su encargo o comisión puedan abastecer o facilitar la sustracción de agua potable de la infraestructura hidráulica estatal.
Al propietario, arrendatario, poseedor o detentador de un predio donde exista una toma con la cual sustraiga o se apropie del agua potable de la infraestructura hidráulica, se le impondrán de dos a cuatro años de prisión y multa de 150 a 300 UMA.
Sibaja agradeció el respaldo de todos los grupos parlamentarios para enriquecer la iniciativa y encontrar soluciones a los problemas de los mexiquenses, pues hay familias que llevan más de cinco años sin agua en sus domicilios, mientras grupos delictivos
roban el líquido de la red hidráulica.
Los diputados morenistas dijeron tener pruebas del saqueo de agua en grandes cantidades, entre ellas la existencia de cisternas hasta de 60 mil litros de capacidad, a las cuales acuden pipas.
Indicaron que entre los principales puntos donde se realiza esta actividad ilegal destacan las colonias México Prehispánico 1 y México Prehispánico 2, La Glorieta, Lázaro Cárdenas y Polígono 3.
