Redacción

El presidente Andrés Manuel López Obrador, aseguró que la iniciativa de Reforma Eléctrica que entregó el viernes pasado a la Cámara de Diputados conviene a los mexicanos, incluso a los empresarios, aunque resaltó que su propuesta no le conviene a los industriales más poderosos.

Durante su conferencia matutina, que en esta ocasión se llevó a cabo desde la capital poblana, el mandatario expuso que con su iniciativa de reforma constitucional en materia eléctrica, habrá garantía para que no se incrementen las tarifas y aprovechó para subrayar que también se garantiza que el litio sea de la Nación.

El presidente minimizó que la iniciativa pudiera perjudicar el Tratado de Libre Comercio suscrito entre México, Estados Unidos y Canadá y muestra de ello, dijo, es que ya se habría devaluado el peso y reitero que “un empresario mexicano se va a beneficiar” con ella.

Destacó además que, aunque esta reforma beneficia a la ciudadanía, no seguirá permitiendo que se beneficien de manera abusiva a los empresarios más grandes y cuestionó “¿Cómo es posible que Oxxo pague menos dinero de energía que una familia en México?”.

El presidente indicó que de no ser aprobada esta reforma, su gobierno buscará “otros mecanismos”, para continuar con su intención.

Finalmente, consideró que espera que el grupo parlamentario del PRI en San Lázaro respalde su iniciativa para que sea aprobada, pues recordó que este partido han defendido la soberanía energética.

Al respecto, cabe mencionar que el grupo mayoritario de Morena en la Cámara de Diputados requerirá de 57 votos para poder aprobar la reforma constitucional del presidente, pues con sus aliados del PT y Partido Verde, sólo cuenta con 277 votos y, para efecto de aprobar una reforma de este tipo, es necesario que reúna la mayoría calificada, es decir, las dos terceras partes de los 500 diputados, es decir 334 votos de legisladores a favor.

Durante la conferencia de prensa, el secretario de Gobernación Adán Augusto López afirmó que con la reforma eléctrica que se implementó en el sexenio pasado, había un modelo que beneficiaba a los grandes industriales.