El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que los 32 migrantes secuestrados en Tamaulipas fueron liberados ayer por sus mismos captores y reconoció que no hay ningún detenido aún, pese a que la autoridad dijo que tenía ubicada la zona.

La entrega de los rehenes, dijo el mandatario en su conferencia matutina, se llevó a cabo porque “había mucho gobierno en la zona y decidieron dejarlos libres. Qué bueno, sanos y salvos”.

Desde el municipio de Felipe Carrillo Puerto, el presiente dijo que la liberación se debió a una serie de factores, entre ellos la buena coordinación con Tamaulipas, para posteriormente elogiar el trabajo del gobernador morenista Américo Villarreal.

“Sí, fue una serie de factores, primero esto que les estoy diciendo. Se intervino pronto con todas las autoridades, que es muy buena la autoridad, el gobernador de Tamaulipas, ayuda también el sensacionalismo porque se sabe en todo el país. No es un asunto que pueda ocultarse”.

Aunque se había dicho que los secuestrados eran 31, hoy el presidente precisó que fueron 32, incluida una bebé de un año de edad.

Adelantó que las víctimas ya rinden su declaración ante la autoridad y que el operativo continúa, aunque aún no hay ningún detenido.