La organización internacional Prisoners Defenders reveló que los médicos que trajo el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador de Cuba a México, realmente son militares encubiertos, que llegan al país para preparar las condiciones que permitirán la permanencia en el poder de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), gente por la que México pagó alrededor de 10 millones de dólares al gobierno cubano.
Y es que de acuerdo con los panelistas que presidieron la presentación de la investigación, el presidente de México no está tan seguro de ganar las elecciones nuevamente en el 2024 y busca blindaje militar para conseguirlo, a través de tareas de propaganda y adoctrinamiento dentro y fuera de las fuerzas armadas.
En conferencia de prensa titulada “La Verdad Militar Tras Las Misiones Médicas de Cuba en México” que se llevó a cabo en la Ciudad de México para presentar los resultados de la investigación reveló que “según los testimonios analizados, dado que prácticamente ninguno de los médicos seleccionados por Cuba para México es especialista, cuando Cuba reporta que son especialistas lo hace porque los Jefes de Misión definen cuáles de los médicos de familia van a fingir qué especialidades, dándoles un curso de formación de la especialidad de 3 a 5 días de duración”.
Lo anterior fue corroborado por Prisoners Defenders con testimonios de médicos cubanos que dieron a conocer su versión, “dado que los médicos no pasan por trámite alguno para convalidar sus conocimientos y ejercer en México, la capacidad de cuba para engañar a las autoridades sanitarias es ilimitada”.
Los médicos, incluso militares, que están pasando por esta situación, temen por poner en peligro a los pacientes mexicanos al ponerse en sus manos dolencias, tratamientos y requerimientos para los que no están capacitados, señala el estudio.
Uno de los testimonios presentado en la conferencia, un médico cubano denunció que “el 100 por ciento nos quitaron el pasaporte, el 100 por ciento entramos en la fuerza aérea mexicana, el 100 por aeropuertos militares y desertaron 17.
“La primera fue una doctora de Holguín, ya una señora mayor, los demás desertaron en diferentes hoteles en donde estaban. Cuba no suelta a los especialistas y mucho menos para México por el miedo de que se les vayan a ir y quedarse sin especialistas (…)
“Los médicos que manda para México son militares y médicos que no tienen especialidad ninguna. Son médicos que trabajan en consultorios en atención primaria en Cuba”.
“Por eso los que mandó en la pandemia, fueron médicos que no trabajan especialidad ninguna, que no tienen preparación de ser especialistas en nada (…)En 5 días prepararon a 123 intensivistas y no entendían nada de lo que tenía que ver con los ventiladores de México y los técnicos mexicanos tienen mucha mas preparación de los cubanos.
“Los cursitos que dan en la Central de Colaboración, de 3 días, por ejemplo, como el curso de coronavirus que nos dieron en 3 días, y en 5 días una preparación en intensivo ¡Imagínese! ¿Quién en 3 días puede aprender algo? y ¿quién en 5 días se hace intensivista? cuando el curso de intensivo en Cuba es de un año (…)”.
La periodista y ex Diputada en México, Beatriz Pagés, dijo luego de haberse dado a conocer los resultados de la investigación por parte del presidente de Prisoners Defenders, Javier Larrondo, que “el gobierno mexicano estaría obligado a transparentar los acuerdos que ha firmado el Presidente Andrés Manuel López Obrador con el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, durante la visita que llevó a cabo el mandatario mexicano a la isla el pasado 8 de mayo de 2022″.
Consideró imprescindible saber por qué llegan militares cubanos ocultos, bajo la identidad médica, y cuáles son las verdaderas tareas que están llevando a cabo en las distintas entidades del país.
Destacó que la presencia encubierta de militares extranjeros en territorio nacional agrede la soberanía, contraviene las leyes y representa una clara intromisión auspiciada por el mismo gobierno mexicano.
Dijo que una vez conocidos los resultados de la investigación, es posible confirmar que los médicos cubanos tienen una misión más política, más militar y de adoctrinamiento, que sanitaria que hecha por tierra la versión oficial de que fueron contratados porque en México hacen falta especialistas. “Táctica propia de la manipulación populista, autoritaria que inventa problemas para engañar, ocultar la verdad y dar una solución ficticia de acuerdo a la conveniencia del gobierno”.
Y denunció que lo que necesita el gobierno es la asesoría de quienes ayudaron a Hugo Chávez y ahora a Nicolás Maduro a preservarse en el poder, con lo que se confirma que “López Obrador no fue a Cuba a traer médicos, fue a traer militares”.
Fue a conseguir apoyo de La Habana para consolidar su proyecto autocrático y poder garantizarlo en el 2024, fue a conseguir médicos que trabajan en México en condiciones de esclavitud, pues más del 90 por ciento de los ingresos se dirigen al gobierno cubano.
Abrir las puertas a estas misiones, representa un paso hacia la consolidación del proyecto político dictatorial que quiere instaurar López Obrador en México.
En su momento, el diplomático y político mexicano, Ricardo Pascoe, reflexionó que en el viaje de AMLO a La Habana, hubo “una presencia simbólica, absolutamente inusual, desde el punto de vista diplomático, el que sus principales acompañantes fueron el Secretario de la Defensa y el Secretario de la Marina. Esto nunca había sucedido.”
En ese sentido, habría qué preguntar cuál fue el papel de ambos secretarios en la visita un régimen, cuya característica, cívico-militar es la fusión de los militares a la gestión gubernamental.
“Yo les pregunto (…) que nos digan qué es lo que acordaron en ese viaje que hizo que fuera tan importante su presencia” y que hoy se atestigua la presencia de militares cubanos en territorio nacional, sin haber sido anunciados.
De acuerdo con la investigación, el Anuario Estadístico de Cuba Coopera y otras fuentes oficiales, en abril de 2020 el Ministerio de Salud Pública de Cuba y la Secretaría de Salud de México , entre los meses de abril y mayo de 2020 arribaron 585 médicos y enfermeros a la Ciudad de México, 40 a Tabasco, 174 a Veracruz y 7 a Quintana Roo, para corroborar el tratamiento del Covid-19.
El contrato tuvo un monto total de seis millones 255 mil 792 dólares, pagados por el gobierno de la Ciudad de México, dos millones de dólares del gobierno de Veracruz y un millón 933 mil 102.08 pesos mexicanos pagados por el gobierno de Quintana Roo. En el caso de Quintana Roo el monto fue depositado directamente en una cuenta del Banco Financiero Internacional S.A. de La Habana. Cuba cobró dichos montos en euros.
El pago incluye el sueldo de los colaboradores, pero también paga, supuestamente, por capacitación, especialización, asesoría e investigación conjunta.
“De los 10 mil 700 dólares por tres meses (aprox. 3.560 USD al mes) que pagó el Gobierno mexicano por cada uno delos 585 médicos y enfermeros cubanos que prestan servicio en la capital del país, La Habana solo les dio 600 dólares para tres meses (200 dólares/mes) como cobro fijo en el país.
Es decir, el Gobierno de Cuba se quedó en primera instancia con el 94,4 por ciento del montante que cobró por sus médicos y les dio a éstos una miseria con la que no es posible ni la digna subsistencia en México.
La organización consideró urgente que el gobierno de México de una explicación a los ciudadanos de tal situación.