Por Francisco Romero
México no reconocerá ningún gobierno en Bolivia que provenga de la acción militar o policial, afirmó la Secretaría de Relaciones Exteriores (SER).
“México, por supuesto, no vería con buenos ojos un gobierno que no emane de un proceso electoral legítimo”, afirmó el canciller Marcelo Ebrard Casaubón en la conferencia de prensa del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Y lo anterior, argumentó el funcionario, porque la renuncia de Evo Morales a la Presidencia de su país fue por presiones de élites del Ejército, lo que representa, dijo, un golpe de Estado, ya que se alteró el orden Constitucional, señaló.
“Habría que decir que, en consecuencia, la postura que México ha definido es de reivindicar, demandar el respeto al orden constitucional y a la democracia en Bolivia, esa es la posición que México quiere hacer valer”, dijo Ebrard.
El canciller lamentó que ante los hechos golpistas del domingo en Bolivia, la Organización de Estados Americanos (OEA) haya guardado silencio, acto por el que México pedirá una respuesta en una reunión urgente que pedirá a los estados miembros.