El crudo mexicano de exportación se ubicó el 6 de mayo pasado en 106.45 dólares por barril, su nivel más alto desde el 25 de marzo pasado y 4.34 por ciento o 4.43 dólares por tonel superior respecto al cierre de la semana anterior, lo que representa su segundo avance semanal consecutivo, de acuerdo con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
En lo que va de 2022, la mezcla mexicana lleva un aumento acumulado de 49.32 por ciento o 35.16 dólares por barril más y un nivel promedio de 93.21 dólares por tonel, 38.11 unidades por arriba de lo previsto en la Ley de Ingresos para 2022 (de 55.10 dólares por barril), 69.16 por ciento más.
A nivel global, del 2 al 6 de mayo, los precios de los contratos a futuro de los crudos West Texas Intermediate (WTI) y Brent reportaron un comportamiento al alza, por segunda semana consecutiva ante la perspectiva de que las sanciones de la Unión Europea sobre el petróleo ruso lleguen a estrechar aún más el suministro global de crudo.
El aumento de los precios fue limitado por las expectativas de menor demanda de petróleo ante las preocupaciones respecto al crecimiento económico mundial, que se han elevado por las estrictas restricciones que prevalecen en China, debido al Covid-19, uno de los principales importadores de petróleo crudo del mundo.
Por su parte, el WTI junio y del Brent para julio de 2022 mostraron un crecimiento durante la semana de 4.85 por ciento o 5.08 dólares por barril más y de 4.90 por ciento, es decir, 5.25 unidades más, respectivamente, al cerrar el 6 de mayo de en 109.77 dólares por tonel el WTI y en 112.39 dólares por barril el Brent, sus mayores niveles desde finales de marzo pasado.