Redacción

Durante el embarazo existen muchos cambios físicos y psicológicos en la mujer. Es importante estar atenta a esos cambios ya que en un abrir y cerrar de ojos se pueden disparar las emociones, por ejemplo, por la mañana puede estar feliz, por la tarde triste y por la noche enojada.

Una investigación realizada por el Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la Facultad de Medicina, menciona que es necesario poner atención en mujeres embarazadas, principalmente en aquellas con antecedentes psiquiátricos o con algún factor de riesgo, ya que estas etapas suelen ser muy difíciles.

En las mujeres embarazadas es muy recurrente las enfermedades mentales como la depresión y los trastornos de ansiedad y en algunos casos se ha detectado esquizofrenia o el trastorno bipolar. Estas enfermedades suelen suceder por el fuerte cambio hormonal, sin embargo, lo más adecuado en mujeres con antecedentes de problemas psicológicos, es que continúen en tratamiento.

Según la especialista de la UNAM Ingrid Vargas Huicochea, existen muchos medicamentos que se pueden tomar en el embarazo, por ello, es necesario que las mujeres asistan a un médico para atenderse y así, tratar su enfermedad. Comentó que asistir con él especialista es lo más sano ya que todo lo que le sucede a la mamá, afecta al bebé.

“El desequilibrio también causa un estado continuo de estrés patológico porque es constante, sostenido e intenso, este a su vez, genera las sustancias propias del estrés que alcanzan al bebé en el vientre materno. Estos niveles no deseables de neurotransmisores y hormonas son como bombas químicas que afectan el desarrollo del feto”, dijo la especialista.

Es importante saber que el consumo regulado de fármacos durante el embarazo es posible, sin embargo, durante la lactancia no, ya que sería transmitido de forma más directa al bebé

La especialista afirma que el posparto es aún más peligroso ya que durante el embarazo, el cuerpo de las mujeres busca cierta estabilidad, mientras que en el posparto disminuye la producción hormonal. Este cambio provoca en la mujer varias alteraciones.

“Un conflicto que se presenta frecuentemente en el posparto es que la gran mayoría de los medicamentos psiquiátricos no son compatibles con la lactancia porque se excretan en la leche materna. Muchas mujeres se enfrentan a conflictos y presiones del esposo o la familia para amamantar, aunque eso implique dejar los tratamientos”, afirmó Ingrid Vargas.

La condición llamada “blues posparto” es muy común en mujeres que se encuentran en esta etapa, ya que en su estado de ánimo se encuentran más sensibles. Esta situación puede durar alrededor de una semana, sin embargo, es importante mantener la tranquilidad.

Es importante que las mujeres sepan diferenciar entre la ” blues posparto” y la depresión posparto ya que son situaciones muy diferentes. La depresión posparto es como su nombre lo dice, un estado de depresión en el que cualquier actividad resulta imposible de realizar.

Los síntomas de esta enfermedad son ánimo bajo, dificultad para tomar decisiones, pensamientos de culpa e incapacidad.

“Para muchas de ellas es muy complicado pedir ayuda de un especialista, en gran medida porque socialmente prevalece la presión de que la maternidad es el periodo más feliz en la vida de una mujer. Por lo mismo, quienes lo viven diferente suelen ser blanco de críticas; se reprimen y viven solas ese dolor y sufrimiento”, dijo Huicochea.

Es importante que las mujeres se encuentren atentas a estos síntomas. Es importante y necesario cuidar la salud mental, más cuando la mujer tiene antecedentes o se encuentra más propensa a tener una alguna enfermedad mental, ya que se puede agravar durante el embarazo.

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