En los próximos días los fans podrán solicitar por un lugar en una de las tiendas que contarán con electricidad y corriente de agua

Redacción

Qatar espera albergar a 1,2 millones de aficionados durante la Copa Mundial de la FIFA a finales de este año. En este contexto, y con alrededor del 80% de la capacidad hotelera reservada para futbolistas, delegaciones, prensa, árbitros y dirigentes, los organizadores han apelado a la creatividad para ofrecer nuevas opciones de hospedaje. Es así que esta semana se lanzó una iniciativa apuntada a los fanáticos más “aventureros”.

Serán mil carpas beduinas las que estarán disponibles en las afueras de Doha para quienes quieran dormir allí. “Esta es una de las opciones que se pondrá en marcha en las próximas dos semanas”, adelantó Omar al-Jaber, funcionario responsable de alojamiento en el comité supremo que organiza el torneo. “Es un campamento real”, explicó durante una rueda de prensa. “Necesitamos darle a la gente la experiencia de un desierto y una tienda de campaña al estilo beduino normal”.

Las carpas contarán con sistemas de agua, electricidad y drenaje, pero no tendrán aire acondicionado en el país conocido por el calor extremo del verano pero los inviernos moderados. También está previsto otro campamento de lujo con 200 tiendas de campaña para los aficionados con mayor poder económico.

Estas tiendas se instalarán a lo largo de una playa llamada Sealine en el sur del país, al borde del desierto, y también se anunciarán otras áreas, comentó Jaber, quien además agregó que “más de 100.000 habitaciones” estarán disponibles en el momento del torneo, buscando disipar las preocupaciones sobre la capacidad de alojamiento en el pequeño emirato.

Los fanáticos podrán elegir entre residir en zonas especialmente designadas, así como apartamentos, villas, cabañas y dos cruceros. Los organizadores ya han reservado una gran parte de las habitaciones de hotel del país para los equipos, los árbitros y la prensa, pero la FIFA liberará las habitaciones que no se utilicen, explicó Jaber, quien adelantó que aún hay hoteles en construcción y prometió que habrá más habitaciones disponibles en los próximos meses.

A su vez, más de 160 vuelos de ida y vuelta están programados diariamente desde los países vecinos del Golfo, por lo que los fanáticos pueden también optar por pasar la noche en otras naciones y volar a Qatar solamente los días de partido.

Celebrada del 21 de noviembre al 18 de diciembre, la Copa del Mundo se realizará por primera vez durante el invierno del hemisferio norte para evitar temperaturas de verano que en ocasiones superan los 45 grados centígrados.