Los artículos que tenemos en el hogar, como los electrodomésticos o línea blanca, tiene un periodo de vida. Unos pueden durar y otros menos. Para ello, influye mucho la marca, el material y, por supuesto, el cuidado y mantenimiento que le demos.
Sin embargo, al final de cuentas, cada artículo tiene un periodo de vida. Por ello, al momento de reemplazarlo o comprar el primero en su tipo, es importante destinar el tiempo suficiente para ejercer un consumo responsable y comparar precios y calidad, pues se tratan de artículos que tiene un costo importante y, por lo tanto, es necesario evitar compras impulsivas que pudieran derivan en duros golpes para la economía familiar.
En ese sentido, la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), recomienda a quienes vayan a comprar algún electrodoméstico o artículo de línea blanca a que revisen los resultados de su programa Quién es quién en los precios, pues ha identificado una importante variedad de costos en dichos productos, como el caso de las estufas, en donde encontró una disparidad de hasta 113 por ciento.
Por ejemplo, de acuerdo con la institución pública, resulta que la estufa de la marca Mabe, modelo EM7657, de 30 pulgadas y seis quemadores, tiene un precio de 11 mil 999 pesos en el Elektra de la Mega Plaza de Izcalli, pero en el Coppel de Plaza Cristal de Atizapán, se puede conseguir en ocho mil 799 pesos, es decir, tres mil 200 pesos (36 por ciento), más barato
Otro ejemplo es la Acros, modelo NAW 1001, de 20 pulgas y cuatro quemados, la cual se puede adquirir en el Chedraui de Plaza Coacalco a un precio de dos mil 635 pesos, pero en el Mega Soriana de Izcalli cuesta cinco mil 620 pesos, es decir, más ¡Más del doble! En otras palabras, la diferencia entre ambos precios es de dos mil 985 pesos (113 por ciento).
La estufa de la marca Whirlpool, modelo WFR 5000, de 30 pulgadas y seis quemados, se venden en 12 mil 599 pesos en el Liverpool de Perinorte, pero en El Palacio de Hierro de Satélite tiene un precio de nueve mil 346 pesos, es decir, tres mil 253 pesos (34 por ciento), más barato.
Y un caso más es la estufa Whirlpool, modelo WFR3200, de 30 pulgadas y seis quemadores, que en La Comer de El Dorado se puede comprar en 11 mil 498 pesos, pero en el Chedraui de Atizapan cuesta siete mil 995 pesos, lo que implica una diferencia de tres mil 503 pesos (43 por ciento).
Por todo lo anterior, al PREFECO insistió en la necesidad de comprar precios al momento de adquirir un bien duradero, como el caso de las estufas, pues se tratan de artículos que implican un gasto importante para la economía familiar. Para ello, recordó que tiene en su página de internet los precios máximos, mínimos y promedio de diferentes artículos y productos, con el objetivo de que la población eiega la mejor opción.
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