Por Alina Archundia Ramírez     

El Consejo Coordinador Empresarial (CCE), advirtió que el respeto y cumplimiento de las leyes y a la Constitución están en grave riesgo, ante las declaraciones del director de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett Díaz, en el sentido de que la reforma eléctrica contempla la cancelación de contratos sin indemnizaciones.

 “La solución no es que un grupo de personas dicten normas inconstitucionales, sino todo lo contrario, debemos reforzar y consolidar aún más nuestro estado de derecho”, afirmó el presidente de la máxima cúpula empresarial del país, Carlos Salazar Lomelín.

Consideró que utilizar el nacionalismo como pretexto para atentar contra el estado de derecho “es realmente un ataque contra todos nosotros. Es un atentado contra el sistema que tantos años nos ha costado construir y contra los preceptos legales que nos protegen de la arbitrariedad del autoritarismo”.

El presidente del CCE manifestó la necesidad de que desde la ciudadanía se impida que, desde el gobierno, arbitrariamente se vulneren y se pasen por alto los diques de contención legales, “porque entonces sería admisible que cualquiera lo haga, o que cualquier ciudadano que considere que una ley no le favorece, la desconozca”.

Carlos Salazar afirmó que el propio estado de derecho no es inamovible, y proporciona los medios para defender cualquier idea y proponer las novedades que se quieran introducir en nuestro sistema constitucional.

“El problema es que respetando las normas de hoy, estas declaraciones y propuestas no tienen cabida. Reformar la ley con base en la ideología y la manipulación de los distintos sectores de la ciudadanía es totalmente inaceptable. Es una estrategia política que sólo genera, como resultado, el engaño y la división de la sociedad”, aseguró.

A nombre de las 12 organizaciones que integran el CCE, Carlos Salazar hizo un enérgico llamado a respetar el estado de derecho e invitó al poder legislativo a emitir un voto sustentado y responsable.

“Estamos en contra de la provocación y a la polarización; sí al diálogo respetuoso para mantener una industria eléctrica fuerte, sana y competitiva, generadora de empleos y crecimiento en favor del bienestar de México”, puntualizó.

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