Harán un diagnóstico del uso de plaguicidas altamente peligrosos en las cuencas de Cuitzeo, Pátzcuaro y Zirahuén
La región de Valles Altos, Michoacán, ha enfrentado desafíos significativos en las últimas décadas debido a cambios en la cobertura del suelo y patrones de lluvias, exacerbados por la variabilidad y el cambio climáticos. Estos cambios han provocado vulnerabilidad hídrica, conflictos sociales y efectos negativos en la salud de los habitantes.
Ante estos desafíos, La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO México) y la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), en colaboración con el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) y el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA) han implementado dos iniciativas que contribuyen a enfrentar dicha problemática:
La primera de ellas y en colaboración con el INIFAP se impulsó “Acciones para aumentar la resiliencia de productores y sistemas productivos en las cuencas de Michoacán” con el objetivo impulsar la transición a sistemas productivos resilientes y sustentables en las cuencas de Michoacán.
Entre los resultados alcanzados incluyen la elaboración de un extenso estudio titulado “Caracterización y diagnóstico del uso de plaguicidas altamente peligrosos en las cuencas de Cuitzeo, Pátzcuaro y Zirahuén”, proporcionando recomendaciones para la transición hacia alternativas agroecológicas.
Impulsan prácticas de conservación de suelo y agua
Además de implementar escuelas de campo y grupos consultivos de trabajo para promover prácticas de conservación de suelo y agua. Y, caracterizar las áreas potenciales para instalar sistemas agroforestales en terrenos de las cuencas.
Sol Ortiz, directora general de Política Prospección y Cambio Climático de la Sader destacó: “El proyecto busca rescatar el conjunto de cuencas hídricas en el territorio, por lo que la colaboración entre instituciones resulta fundamental. Se reconoce la importancia de escalar las colaboraciones y aprovechar eficientemente los recursos disponibles”.
Por otra parte, la iniciativa “Diseño e implementación de un sistema digital de monitoreo y evaluación para el uso óptimo del agua y de los fertilizantes en los Módulos III, IV y V del Distrito de Riego 020 Morelia-Queréndaro, Michoacán”, a cargo del IMTA, busca optimizar el uso del agua y los fertilizantes en la región.
Como parte de los resultados destacados destaca la recopilación de datos satelitales para análisis de suelos y clima.
Desarrollan aplicación móvil para dosis de fertilización
Además de desarrollar una aplicación móvil para proporcionar información detallada sobre características del suelo y dosis de fertilización.
E implementar estrategia de difusión y capacitación a productores y directivos de los módulos de riego y ejidos adscritos para la adopción masiva de la aplicación.
Al respecto, Lina Pohl, Representante de la FAO México, mencionó: “La colaboración entre la FAO y la Sade ha sido fundamental para el éxito de este proyecto, que busca mejorar la eficiencia del riego y la producción agrícola con base en evidencia científica.
Además de los componentes de agua y fertilizantes, el proyecto también incluye la conservación de recursos genéticos agrícolas, pesqueros, acuícolas y microbianos y la colaboración con otras instituciones, sectorizadas en la Secretaría de Sader, como el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP), el Colegio de Postgraduados (COLPOS) y la Universidad Autónoma Chapingo (UACH), así como con representantes de Sader en Michoacán, ha sido clave para el desarrollo y la implementación efectiva del proyecto”.
Los resultados mostrados en el contexto de la “Rehabilitación de Cuencas en el estado de Michoacán” representan un paso significativo hacia la rehabilitación de los lagos en los Altos del estado y la promoción de prácticas sostenibles en la región. La colaboración entre diversos actores demuestra el compromiso conjunto por enfrentar los desafíos ambientales y socioeconómicos en la zona.
