- De acuerdo con Boletines Estadísticos de la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación, de enero a octubre de 2021, 19 mil 793 personas de entre 0 y 17 años fueron repatriadas de Estados Unidos a México
Red de corresponsales
Según los Boletines Estadísticos de la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación, de enero a octubre de 2021, 19 mil 793 personas de entre 0 y 17 años (13% mujeres y 87% hombres) fueron repatriadas de Estados Unidos a México. La Red por los derechos de la Infancia en México, señaló que esto representa un aumento de 105.4% con respecto a la cantidad de repatriaciones de niñas, niños y adolescentes que tuvo lugar de enero a octubre de 2020 (9 mil 635 casos en total).
Además, en ese mismo periodo, en 2021 el gobierno mexicano realizó 48 mil 707 detenciones de migrantes entre 0 y 17 años (41.1% mujeres y 58.9% hombres). Esto refleja un aumento de 402.5% con respecto a la cantidad de niñas, niños y adolescentes migrantes detenidas de enero a octubre de 2020 (9 mil 692 casos en total).
Durante la presentación de la “Infancia Cuenta en México desde y para niñas, niños y adolescentes: Migración en la Frontera Sur, 2021″ llevada a cabo el 15 de diciembre de este año, el Grupo de Participación de la REDIM compartió estadísticas sobre las condiciones y la situación de movilidad actual para las personas migrantes en México.
Entre ellas destaca que “Chiapas, Veracruz, Tabasco y Tamaulipas son los estados con más detenciones de niños, niñas y adolescentes migrantes. Al menos 4 de cada 10 fueron detenidos en Chiapas entre los años 2010 y 2014, mientras que 7 de cada 10 fueron detenidos en Veracruz, Tabasco y Tamaulipas”, explicó Valeria, integrante del grupo de la REDIM.
Dentro de los datos resaltados por el la Red por los Derechos de la Infancia en México, de las infancias y adolescencias deportadas en México, 98.7% pertenecen al llamado “Triangulo migratorio” conformado por Guatemala, El Salvador y Honduras. Dentro de esta zona se han registrado altos niveles de violencia generados principalmente por grupos delictivos organizados. Asimismo la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha señalado que las desigualdades, el desempleo y las carencias están en aumento en la región “empujando a millones de personas en las tres naciones a la pobreza”.
La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU estima que, antes de la llegada de la pandemia del coronavirus más de 5 millones de personas necesitaban asistencia para sobrevivir en El Salvador, Guatemala y Honduras, pero actualmente la cifra se ha doblado y ya alcanza a 10 millones de personas, el 30% de la población total de los tres países.
En abril de este año, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia informó, durante una sesión informativa sobre la situación humanitaria en El Salvador, Guatemala y Honduras, que, desde el inicio del año 2021 se dio un aumento de infancias migrantes en México de 380 a casi 3 mil 500 en tres meses, un incremento nueve veces superior. Además la UNICEF destacó que, en muchos albergues mexicanos, los niños, niñas y adolescentes representan al menos el 30% de la población migrante.
Cabe señalar que la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes resalta las medidas especiales de protección que las autoridades deberán adoptar para garantizar los derechos de niñas, niños y adolescentes migrantes, acompañados, no acompañados, separados, nacionales, extranjeros y repatriados en el contexto de movilidad humana.
En esta mismas ley se estipula que todos los gobiernos mexicanos tienen la obligación de proporcionar los servicios para el bienestar de la infancia y adolescencia sin importar su nacionalidad o situación migratoria.
De acuerdo con los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes migrantes “Está prohibido devolver, expulsar, deportar, retornar, rechazar en frontera o no admitir, o de cualquier manera transferir o remover a una niña, niño o adolescente cuando su vida, seguridad y/o libertad estén en peligro a causa de persecución o amenaza de la misma, violencia generalizada o violaciones masivas a los derechos humanos, entre otros, así como donde pueda ser sometido a tortura u otros tratos crueles, inhumanos o degradantes.”
Sumado a ello, se estipula que ningún caso una situación migratoria irregular de niña, niño o adolescente, preconfigurará por sí misma la comisión de un delito, ni se prejuzgará la comisión de ilícitos por el hecho de encontrarse en condición migratoria irregular.
La Red por los derechos de la Infancia en México dio conocer el documento realizado con el fin de crear un foro de participación para y por las infancias, con el cual se pueda fomentar su participación y reconocerles como sujetos de derechos.
“Cuando migramos los niños y niñas niños dejamos nuestros pueblos, nuestras familias, agarramos nuestras pocas ropas con la esperanza de tener una mejor vida. Mis amigos de mi salón son Nahuas de Veracruz y Guerrero Purépechas de Michoacán, Otomíes de Querétaro, Wixarikas de Jalisco y viajaron para trabajar en León. Ellos y ellas venden en las calles flores, papas, artesanías y ayudan a llevar dinero a su familia para poder comer y así regresar al pueblo para ser felices. Mis amigos y mis amigas tienen derechos y queremos una mejor vida para ellos y nosotros”, declaró Ángel, niño migrante indígena y miembro del Grupo de Participación de la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) durante la presentación del documento.