La actividad productiva del país ya resiente los cambios constitucionales emprendidos por el gobierno mexicano, como el caso de la reforma judicial.
En este sentido, la industria de la construcción transita por una compleja situación, pues en octubre de este año el valor de la producción de las empresas del sector se desplomó -21.5 por ciento respecto al mismo mes de 2023, con lo que ligó seis caídas a tasa anual, la peor racha desde la época de la cuarentena por el brote del COVID19, de acuerdo con datos ajustados por estacionalidad del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
De esta manera, la variable que mide el valor de la producción de la industria de la construcción se colocó en 92.3 puntos en octubre de este año, lejos de los 118.7 alcanzados en septiembre de 2023.
En su comparativo mensual, resultó que el valor de la producción de las empresas constructoras también cayó -0.6 por ciento de septiembre a octubre de este año, con lo que sumaron cuatro tropiezos a tasa mensual.
Según datos originales (sin ajustar), el valor de la producción de las empresas constructoras cayeron -21.4 por ciento a tasa anual, en donde las obras en el rubro de transporte y urbanización bajaron -27 por ciento; en tanto que el valor de la construcción en electricidad y telecomunicaciones disminuyó -11.8 por ciento y en el sector de petróleo y petroquímica retrocedieron -27 por ciento.
En esa línea, resultó que el personal ocupado en la industria de la construcción disminuyó -6.6 por ciento a tasa anual en octubre pasado, en donde la plantilla de obreros bajó -5.9 por ciento y la de empleados administrativos, contables y de dirección descendió -5.7 por ciento.
