Frente al alza que reportan los precios de productos de consumo básico, el consumo se mantiene débil, pues en marzo de este año las ventas en los negocios mayoristas se desplomaron -8.3 por ciento respecto al mismo mes de 2023, lo que representó la mayor caída desde noviembre de 2020, en el marco de los embates por el brote del COVID19, de acuerdo con datos ajustados por estacionalidad del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

Con ello, el Indicador que mide los ingresos por suministro de bienes y servicios en empresas comerciales al por mayor se colocó en 92.9 puntos, lejos del máximo histórico de 106.1 alcanzado en junio de 2022.

En su comparativo mensual, resulta que las ventas en los negocios mayoristas bajaron -4.1 por ciento de febrero a marzo de este 2024, con lo que ligó dos caídas a tasa mensual.

El débil comportamiento de las ventas mayoristas ocurre en el marco de un incremento de alimentos, como el caso de la cebolla, limón, jitomate, pan de caja, aceite, entre otros, a pesar de que la inflación general se mantiene a la baja.

Por giros y con datos originales (sin estacionalizar),, resultó que los negocios que mostraron las mayores caídas en sus ventas fueron productos textiles y calzado (-23.9 por ciento a tasa anual); camiones y refacciones de automóviles (-3.5),  artículos textiles, bisutería, accesorios de vestir y calzado (-7.9); y artículos de palería (-4.5 por ciento).

En cuanto a las ventas en los negocios al por menor, resultó que durante marzo pasado mostraron un crecimiento de 0.5 por ciento tanto a tasa mensual como anual, con base a datos ajustados por estacionalidad.

Con ello, el indicador se colocó en 117.3 puntos, es decir, por debajo del máximo histórico de 119.1 unidades alcanzado en junio de 2023.