Por Alejandro Durán
Las autoridades mexicanas deben garantizar el Estado de Derecho, pues de lo contrario no habrá un ambiente propicio para trabajar e invertir, advirtió el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
“Para que las empresas sean lo más exitosas posibles en afrontar dichos retos, el Estado mexicano tiene un gran reto: el de fortalecer y garantizar el Estado de derecho con el fin de generar un ambiente propicio para trabajar e invertir”, afirmó el organismo dependiente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
En este sentido, el órgano de análisis económico consideró que si logran el sector privado y el sector público, en conjunto, afrontar los retos, se darán las condiciones para que la inversión de todos los mexicanos se dinamice y se alcancen mayores niveles de crecimiento económico y bienestar social.
“En este momento, entre los temas que más preocupan a la sociedad están, sin duda, el bajo crecimiento económico, la inseguridad y la creciente corrupción e impunidad. Por lo anterior, es importante delinear las acciones que puede llevar a cabo el sector privado para contribuir a construir un mejor entorno económico y de bienestar para nuestro país”, afirmó.
En este sentido, dijo que entre las acciones estratégicas para impulsar un ambiente de negocios en México, destacó la necesidad de fomentar mayores niveles de inversión.
“Para ello se debe impulsar en primer lugar el Programa de infraestructura anunciado a finales del 2019. En segundo lugar, será importante incorporar proyectos de inversión en el sector energético donde pueda participar el sector privado. Más allá, el sector debe insistir en que el gobierno produzca y mantenga un ambiente de certidumbre y confianza para invertir en proyectos de largo alcance cuando dicho ambiente se consolide”, argumentó.
Asimismo, el CEESP dijo que es esencial fomentar la integración de un mayor número de proveedores locales para incluir un mayor contenido nacional en el valor de los productos y servicios comerciables.
“Las grandes empresas y conglomerados mexicanos (empresas tractoras) deben fomentar una mayor integración de proveedores nacionales en una relación comercial ganar –ganar”, apuntó.
De igual manera, dijo que las grandes empresas en México deben diseñar e instrumentar programas de desarrollo de proveedores locales no sólo para la industria maquiladora y manufacturera de exportación en general, sino también para incluir a la región del sur-sureste. De hecho, el sector privado podría desarrollar ecosistemas productivos de acuerdo con los sectores estratégicos o con alto potencial en cada una de las regiones del país.