La Unión Nacional de Avicultores (UNA) solicitó al gobierno federal modificar el decreto presidencial que pretende sustituir gradualmente las importaciones de maíz amarillo transgénico procedente de Estados Unidos “a fin de no condicionar su acceso a México, en el mediano y largo plazo”.
El organismo confía que las consultas que iniciarán los gobiernos de México y Estados Unidos, conforme a las disposiciones sobre solución de diferencias estipuladas en el T- MEC, resuelvan el diferendo en torno al maíz importado de Estados Unidos, a fin de no requerir un panel para resolver esta controversia.
Datos de la Unión avícola, el sector demanda alrededor de10 millones de toneladas de maíz amarillo anualmente, de las cuales 7 millones se importan.
David Castro Monroy, presidente de la UNA, indicó que resulta de mayor importancia garantizar que el sector avícola tenga acceso suficiente a los insumos primarios, como el maíz amarillo, para mantener el abasto oportuno y accesible de huevo y pollo para la población.
Diferendo de transgénicos es científico
Los avicultores coincidimos en que el diferendo ocasionado por el uso de maíz amarillo es de orden estrictamente científico y técnico, por lo que debe ser resuelto por probados expertos en la materia, destacó.
De acuerdo con el artículo séptimo del decreto, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 13 de febrero del año en curso, las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal realizarán las acciones conducentes para sustituir gradualmente el maíz americano destinado al consumo animal.
“Ello puede comprometer la disponibilidad oportuna de este insumo esencial para la industria avícola”, indicó el organismo avícola.
Castro Monroy destacó que las economías mexicana y estadounidense son complementarias. México compra sus granos para producir pollo y huevo, mientras que Estados Unidos nos compra otros productos, como frutas y hortalizas”.