México enfrenta una grave concentración de la inversión extranjera que llega al país, pues tan sólo tres de las 32 entidades federativas concentran 40 por ciento de los flujos que entran al mercado mexicanos.
De esta manera, de acuerdo con datos de la Secretaría de Economía (SE), la Ciudad de México (con 21.8 por ciento), Nuevo León (9.3); y el Estado de México (8.8); del año 1999 al noveno mes de 2022 captaron más de 267 mil millones de dólares por concepto de Inversión Extranjera Directa (IED), lo que representó 39.9 por ciento de los 671 mil 133 millones que ingresaron el país durante el periodo en cuestión.
Incluso, tan sólo en el primer semestre del año pasado, esas tres entidades federativas concentraron 45.8 por ciento (14 mil 730 millones de dólares), de la IED que ingresó al país en dicho periodo (32 mil 147 millones de dólares): La Ciudad de México captó 10 mil 296 millones, Nuevo León dos mil 805 y el Estado de México mil 629 millones.
Al respecto Enrique Dussel, economista de la UNAM, alerta sobre los graves riesgos que implica la sensible concentración de inversión foránea que padece el país.
“La información sobre la IED realizada notificada al Registro Nacional de Inversión Extranjera (RNIE), por entidad federativa refleja, además de una imperante concentración en las principales entidades federativas, una creciente orientación hacia otras entidades”, señaló.
Entre las consecuencias de dicha concentración se encuentra la segregación en materia de generación de empleos, generación de riqueza y mejor calidad de vida que enfrentan los países que no captan IED,
Más de la mitad de los estados, fuera del mapa de IED
De acuerdo con cifras de la SE, 17 entidades federativas captaron cada una menos de dos por ciento de l IED que ingresó a México del año 1999 al noveno mes de 2022.
Según el RNIE, en dicho periodo, Baja California Sur captó 1.8 por ciento del total de la inversión extranjera; le siguió Aguascalientes (con el 1.7 por ciento); Michoacán (1.5); Quintana Roo (1.4); Sinaloa (1.2); Guerrero (1.0); Morelos (1.0); y Oaxaca (1.0 por ciento).
Un caso especial ocupan los estados que no captaron no siquiera uno por ciento de la IED: Durango (0.9 por ciento); Tabasco (0.9); Hidalgo (0.8); Nayarit (0.7); Yucatán (0.6); Tlaxcala (0.6); Campeche (0.5); Chiapas (0.5); y Colima (0.4 por ciento).
Por lo anterior, las 17 entidades federativas (más de la mitad del total que conforman la República Mexicana), concentran apenas 17.1 por ciento del total de la IED que ingresó al país en los últimos casi 23 años
Un dato importante es que varias de dichas entidades federativas se sitúan en la región sur-sureste del país, zonas que registran las mayores tasas de pobreza en México.
Cabe destacar que la información de la IED por entidad federativa se refiere al lugar donde se ubica el domicilio del representante legal o de la oficina administrativa de cada empresa y no necesariamente a la entidad federativa donde se realizan las inversiones. Lo anterior podría sobrevaluar la participación de las grandes entidades federativas como la Ciudad de México, Nuevo León, Estado de México y Jalisco.
