Redacción
Tras las festividades las y los capitalinos se deshacen de los árboles de Navidad y Nochebuenas, en años anteriores terminaban en la basura, sin embargo se han ido ampliando las opciones para reducir la contaminación por deshechos y hoy en día ya es posible darles una segunda oportunidad a las plantas.
A partir del 9 de enero y hasta el próximo 18 de febrero, los ciudadanos podrán llevar solamente sus flores de Nochebuena al Centro de Acopio que la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México instalará en el Parque Ecológico de Xochimilco.
Con el término de las celebraciones en la CDMX, la Sedema, a través de la Dirección General del Sistema de Áreas Naturales Protegidas y Áreas de Valor Ambiental (DGSANPAVA), recibirá flores de nochebuena en maceta, con tallos o sueltas, en el acceso principal del Parque Ecológico de Xochimilco, ubicado en Canal de Garay, Anillo Periférico I, Parque Ecológico de Xochimilco; en un horario de 09:00 a 16:00 horas, de martes a domingo.
La Sedema solicitó a la población llevar las macetas sin ningún plástico o papel adicional. Y en caso de llevar sus macetas en un contenedor, se recomienda que sea un contenedor de material reutilizable, con la finalidad de evitar generar residuos en el Parque y en sus hogares.
Destacó la secretaría que con las plantas recolectadas el personal de la DGSANPAVA generará composta que servirá como abono para el invernadero, vivero y chinampa demostrativa del Parque Ecológico de Xochimilco, mientras que la otra parte será empleada en los talleres de educación ambiental.
Acerca del Parque Ecológico de Xochimilco, forma parte del Área Natural Protegida “Ejidos de Xochimilco y San Gregorio Atlapulco”, se trata de uno de los 18 espacios rehabilitados por el Gobierno de la Ciudad de México mediante el programa Sembrando Parques.
Según Sedema, en dicho espacio se realizaron intervenciones para desazolvar el Lago Huetzalin y los dos humedales, de igual manera se habilitó un invernadero y se creó un vivero; también se realizaron otras mejoras que ahora permiten a las familias conectarse con la naturaleza mediante caminatas, recorridos en bicicleta o lancha y disfrutar de diversas actividades de educación ambiental